LA PAZ, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
La francesa Total y la estadounidense Vintage firmaron nuevos contratos petroleros y operarán en Bolivia bajo las reglas de la nacionalización decretada por el presidente Evo Morales en mayo, según informó el ministro de Hidrocarburos, Carlos Villegas.
Hoy, sábado, continuarán las negociaciones con las restantes petroleras que operan en el país, entre ellas la hispano argentina Repsol YPF, que junto con la brasileña Petrobras, controla más de la mitad de las reservas de Bolivia. Aunque el plazo para la firma vence el sábado, se informó que ese día y el domingo firmarán otras compañías.
A partir de ahora, ambas empresas petroleras entregarán la producción a YPFB y después la petrolera estatal les retribuirá en dinero por su trabajo. YPFB se convierte así en la única administradora de los recursos energéticos y las petroleras pasan a la condición de prestadoras de servicios.
La francesa Total, cuarta empresa petrolera a nivel mundial, se compromete a realizar trabajos de exploración en Incahuasi y Aquio con una inversión de 1.154 millones. El país participa con 82% en la renta y YPFB a lo largo de los años del contrato obtiene 2.400 millones de dólares, según informa la agencia boliviana Bolpress.
Por su parte, Vintage continuará manejando los campos de gas de Naranjillo, Porvenir y el Chaco, en el sur de Bolivia, sin darse detalles sobre sus inversiones futuras.
EVO MORALES SATISFECHO
"A partir de ahora, las petroleras dejan de ser dueñas de los hidrocarburos y pasan a ser socias", declaró satisfecho el presidente boliviano, Evo Morales, tras la firma de los convenios. "Estamos firmando de cara al pueblo con transparencia y honestidad", añadió.
A las empresas que todavía no firmaron les anunció que tienen unos días para cumplir con las reglas establecidas. "Quiero decirles que tienen que respetar nuestras normas y vamos hacerlas cumplir", advirtió.
AL SERVICIO DEL ESTADO
Las multinacionales se convertirán en operadoras de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) a cambio de una participación de entre el 18 y 50 por ciento del valor de la producción. El presidente de la petrolera estatal, Juan Carlos Ortiz, dijo que la empresa recibirá una ganancia líquida de 120 millones de dólares para fortalecer sus operaciones.
La nacionalización obliga a las empresas a entregar toda su producción al estado boliviano y, en algunos casos, a pagar nuevos tributos, pero no incluye confiscaciones. La norma señala que las empresas que no firmen nuevos contratos deberán abandonar el país.
Algunas compañías deben asimismo vender parte de su paquete accionario para que YPFB tenga la mayoría en el consorcio. Las socias en los dos campos de mayor producción de gas, la brasileña Petrobras, la hispano argentina Repsol YPF y Total, deben dar una participación del 82% al Gobierno boliviano.