Actualizado 13/11/2015 21:32

Los bolivianos, prácticamente divididos sobre la reelección de Morales

LA PAZ, 13 Nov. (Reuters/EP) -

   Los bolivianos están prácticamente divididos de cara al referéndum que se celebrará el próximo 21 de febrero sobre la reforma constitucional que permitiría al actual presidente, Evo Morales, encadenar otro mandato consecutivo, según un sondeo de opinión publicado en 'Página Siete'.

   Sin embargo, encuestas anteriores, como la realizada por IPSOS el mes pasado, conceden a Morales una amplia ventaja. De acuerdo con sus proyecciones, el 49 por ciento de los bolivianos votaría 'sí', frente al 39 por ciento del 'no'.

   El nicho electoral de Morales estaría en las zonas rurales, ya que han sido las más beneficiadas durante su década en el poder. "En los centros urbanos hay un gran rechazo a la reforma de la Constitución", ha dicho el político opositor David Crispin.

   La Coordinadora Nacional para el Cambio (Conalcam) presentó el pasado 17 de septiembre en el Congreso un proyecto de ley para que Morales y su vicepresidente, Álvaro García Linera, "puedan ser reelectos por dos veces de manera continua", en lugar de una, como marca la Carta Magna vigente.

   Actualmente la Constitución solo permite que el presidente y el vicepresidente puedan ser "reelegidos de manera continua por una sola vez", lo que deja al líder indígena sin opciones de cara a los comicios de 2019.

   Morales llegó al poder en 2006, convirtiéndose en el primer presidente indígena del país andino. En enero de 2009 reformó la Constitución y en diciembre de ese mismo año fue reelegido en el cargo, la primera vez al amparo de la nueva norma fundamental, lo que le permitió revalidar el cargo en 2014.

   Sin embargo, el límite de una reelección consecutiva establecido en la Carta Magna impide que Morales pueda prolongar su mandato sin que aún haya un sucesor claro para el carismático dirigente, algo que "le quita el sueño", según confesó él mismo.

   De aprobarse, la enmienda constitucional permitiría a Morales no solo presentarse a las elecciones de 2019, sino también a las siguientes, ya que --tal y como pasó en 2009-- sus anteriores mandatos no serían tenidos en cuenta.