Publicado 08/11/2019 19:10

Bolivia.- Camacho abre una fisura en la oposición boliviana y se desvincula de Mesa

El líder opositor boliviano Luis Fernando Camacho
El líder opositor boliviano Luis Fernando Camacho - REUTERS / DAVID MERCADO

MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -

El jefe del Comité Cívico de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, se ha desvinculado este viernes del principal candidato opositor a las elecciones presidenciales celebradas el pasado 20 de octubre en Bolivia, Carlos Mesa, al que ha acusado de buscar exclusivamente "su propio interés".

Mesa, ex presidente y ex vicepresidente, concurrió a los comicios como aspirante de Comunidad Ciudadana y, tras denunciar el supuesto fraude electoral del Gobierno para asegurar un cuarto mandato a Evo Morales, el resto de sectores de la oposición boliviana se aglutinaron en torno a él.

Sin embargo, Camacho, que hasta ahora era uno de los dirigentes destacados en Santa Cruz --bastión opositor--, ha despuntado como líder nacional tras el incidente que sufrió el martes, cuando viajó a La Paz para entregar a Morales una carta exigiendo su dimisión pero manifestantes oficialistas le obligaron a regresar a su ciudad.

Camacho ha dado este viernes una rueda de prensa desde La Paz en la que ha marcado distancias con Mesa. Según su versión, el antiguo mandatario pretendía aceptar la auditoría electoral que está realizando la Organización de Estados Americanos (OEA) para determinar si hubo fraude.

"Al señor Carlos Mesa lo acompañamos con su pedido por el voto del pueblo hasta el día en que nos reunimos en la ciudad de La Paz y quería que firmásemos una carta que tenía redactada para dejar a la OEA la posibilidad de dar el resultado", ha contado.

"Desde ese momento, yo no asistí nunca más a una reunión con el señor Carlos Mesa y me di cuenta de que nosotros estábamos apoyando a una persona que estaba viendo su propio interés y no le importaba el voto del pueblo", ha denunciado, de acuerdo con la prensa local.

Esto arrojaría luz sobre lo ocurrido con la OEA. El secretario general del bloque hemisférico, Luis Almagro, anunció en un comunicado que las partes, tanto el Gobierno como Mesa, habían aceptado la auditoría electoral pero este último respondió aclarando que no la aceptaba porque era un acuerdo "unilateral" que no tenía en cuenta a la oposición.

Desde entonces, Mesa ha rechazado una y otra vez la auditoría de la OEA y ha pasado de pedir una segunda vuelta a la anulación de las elecciones presidenciales y la celebración de unas nuevas.

Camacho también ha esgrimido que se aparta de Mesa porque "los políticos tuvieron la oportunidad de devolverle la paz al país" pero no lo consiguieron. "Nosotros somos apolíticos, no defendemos a ningún candidato", ha proclamado.

Interrogado sobre si la ruptura con Mesa dividirá a la oposición, Camacho lo ha descartado: "Cuando usted tiene acciones con un mismo objetivo no puede haber división. El que no coordinemos las acciones con los políticos no refleja simplemente una división. Aquí no hay división".

Mesa se ha limitado a contestar a Camacho con un 'tweet'. "No voy a confrontar con Camacho porque eso sólo beneficiaría a la permanencia del dictador. La unidad de la oposición democrática hoy es imperativa", ha indicado.

Además, el candidato opositor ha emitido un comunicado para insistir en la necesidad de nuevas elecciones con un calendario que permita celebrarlas con el tiempo suficiente para que "en ningún caso" se exceda el actual mandato de Morales, que expira el 22 de enero de 2020.

Mesa ha pedido, como paso previo, la renovación del Órgano Electoral Plurinacional por haberse convertido en "el factor determinante de la corrupción y la violencia social". En concreto, ha reclamado que se declaren vacantes todos sus cargos y se ocupen con "ciudadanos notables" fruto de un "acuerdo estratégico entre el Estado y la sociedad civil" para garantizar la transparencia del proceso.