El Gobierno advierte de que los dirigentes de la COB están usando un "lenguaje de golpe de Estado"
LA PAZ, 9 May. (EUROPA PRESS) -
Un centenar de personas han sido detenidas por los disturbios que se han producido en el marco de la huelga general que la Central Obrera Boliviana (COB) comenzó el pasado lunes para exigir mejoras en el sistema de pensiones, de cara a la reforma legislativa impulsada por el Gobierno de Evo Morales.
El ministro de Gobierno, Carlos Romero, ha informado, en una rueda de prensa celebrada este miércoles en el Palacio de Gobierno, de que la Policía ha detenido a unas 100 personas para impedir "movilizaciones violentas".
El portavoz gubernamental ha revelado que los detenidos transportaban un total de 375 kilogramos de material explosivo en una sola ambulancia y ha mostrado fotografías del vehículo sanitario a la prensa boliviana.
"Se ha secuestrado una ambulancia equipada para prestar auxilio a la población para trasladar una gran cantidad de ANFO y de dinamita en 15 bolsas de 25 kilogramos de peso cada una", ha dicho, en declaraciones recogidas por la Agencia Boliviana de Información (ABI).
Por su parte, el viceministro de Régimen Interior y Policía, Jorge Pérez, ha informado de que este miércoles un grupo de mineros ha volado un puente en la localidad de Caihuasi, ubicado en el departamento de Oruro (suroeste), hiriendo a dos policías.
"Entendemos las movilizaciones, pero ya destruir puentes por donde pasa el transporte público y privado es un daño terrible a la economía del país, a los bolivianos y a la producción", ha considerado, en una entrevista concedida a Radio Panamericana.
Romero ha lamentado que "a pesar de la tarea de persuasión de la Policía para evitar la violencia, los mineros han respondido con dinamitas, piedras y palos". Además, ha advertido de que "algunas personas están intentando atacar a la Policía para alcanzar notoriedad y victimizar la movilización".
LENGUAJE DE GOLPE DE ESTADO
El portavoz gubernamental también ha expresado su preocupación por que "hay dirigentes (de la COB) que están expresando el lenguaje del golpe de Estado". "Les hemos oído decir: 'Así como hemos subido a Morales, lo vamos a tumbar", ha citado.
Romero ha pedido "a los trabajadores movilizados que sean moderados". "Desde el Gobierno, les pedimos que no se acerquen peligrosamente a los proyectos golpistas, que ya asomaron en el año 2008", ha dicho.
El ministro de Gobierno ha instado a "reflexionar" a los dirigentes de la COB y ha reiterado el deseo de diálogo de las autoridades bolivianas. "Evitemos el suicidio colectivo, alejémonos de las tentaciones de violencia y de golpismo", ha pedido.
En la misma línea se ha expresado el ministro de Trabajo, Daniel Santalla. "Lamentablemente el capricho de algunos dirigentes de la COB, no de todos, es primero llamar a esta movilización. Les estamos convocando para que podamos restablecer el diálogo", ha insistido.
EL CONFLICTO
El Gobierno de Morales ha puesto en marcha una reforma de las pensiones por virtud de la cual los trabajadores jubilados cobrarán mensualmente una cantidad de dinero equivalente al cien por cien de los últimos salarios, desde el 70 por ciento actual.
La COB exige que el Gobierno garantice pensiones mínimas de 8.000 bolivianos para los mineros que hayan trabajado al menos 35 años y de 5.000 bolivianos para los trabajadores de otros sectores productivos. El Ejecutivo ha aceptado 4.000 y 3.200, respectivamente.