SANTIAGO, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía chilena y la defensa de los tres soldados bolivianos detenidos por entrar ilegalmente al país sudamericano han llegado a un acuerdo para discutir el próximo viernes distintas opciones para que los uniformados puedan volver a Bolivia.
El diputado oficialista Hugo Gutiérrez ha confirmado al diario chileno 'El Mercurio' que la Fiscalía y la defensa han acordado reunirse a las 10.00 horas (14.00 horas en España) del viernes en el Juzgado de Garantía de Pozo Almonte para negociar la vuelta de los tres soldados a territorio boliviano.
"A los tres se les ofrecerá la suspensión condicional del procedimiento. Después, regresarán a su país inmediatamente", ha aseverado Gutiérrez, al tiempo que ha considerado que "es una muy buena solución para terminar con el conflicto".
Aunque no ha revelado los términos de la negociación, se supone que no incluirá la oferta formulada el pasado lunes por la Fiscalía para que los tres soldados fueran expulsados a cambio de que se declararan culpables, dado que fue rechazada por los uniformados.
SOLDADOS DETENIDOS
Según La Paz, los conscriptos Álex Choque Quispe, Augusto Cárdenas García y José Luis Fernández Choque, que no superan la mayoría de edad en Bolivia (21 años), fueron detenidos el pasado 25 de enero por entrar ilegalmente en Chile, cuando llevaban a cabo un operativo contra la compraventa de vehículos indocumentados.
El Gobierno de Evo Morales ha presentado una demanda en Naciones Unidas contra Chile por violar los tratados bilaterales e internacionales al detener y procesar a los tres soldados, ya que dichos textos establecen la primacía de la vía diplomática sobre la judicial.
Además, el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, ha anunciado que el Gobierno emprenderá también acciones legales contra los Carabineros chilenos por violar una serie de tratados bilaterales e internacionales sobre cooperación policial y judicial.
DISPUTA TERRITORIAL
En el trasfondo del conflicto por los tres soldados está la disputa que enfrenta a ambos países desde 1879, cuando Bolivia perdió su salida al Pacífico tras la guerra que mantuvo con Chile, que culminó con el Tratado de Paz y Amistad de 1904, sobre el derecho de libre tránsito de mercancías bolivianas hacia y desde puertos en el océano.
Chile asegura que con el acuerdo de paz --que fue ratificado por los parlamentos de ambos países veinte años después-- se establecen las fronteras --también las marítimas-- de las naciones combatientes, por lo que no ha lugar a ninguna disputa territorial.
Morales argumenta que el acuerdo de paz es "injusto, incumplido e impuesto" y ha rechazado la intangibilidad de los tratados internacionales, recordando que Estados Unidos se avino a superar el firmado en 1903 con Panamá y accedió a devolverle "gradualmente la soberanía" del canal homónimo.