Actualizado 03/05/2006 20:43

Bolivia.- Ecologistas en Acción espera que la nacionalización de los hidrocarburos suponga una gestión más ecológica

Critica la "maquinaria diplomática" del Gobierno español para defender los intereses de un "reducidísimo" grupo de personas


MADRID, 3 May. (EUROPA PRESS) -

La ONG Ecologistas en Acción aplaudió hoy la decisión del presidente de Bolivia, Evo Morales de nacionalizar los hidrocarburos, por considerar que los recursos naturales, ya sea el petróleo, el gas, el agua, o la biodiversidad, "deben ser gestionados de forma pública por las personas que habitan los territorios donde se encuentran". A su juicio, una gestión privada dentro de las leyes del mercado conlleva, inevitablemente, "el expolio y la sobreexplotación de dichos recursos, ya que la única premisa en la explotación es el máximo beneficio".

Sin embargo, apunta la ONG en un comunicado, "una gestión pública no es sinónimo necesariamente de buena gestión", y con buena gestión se entiende que ésta "busque el beneficio de toda la sociedad y que respete el equilibrio con el entorno". Por ello, la medida adoptada por el presidente boliviano "va en la vía de buscar el beneficio de toda la sociedad", aunque no tienen "tan claro" que vaya a conllevar un mayor respeto ambiental en la gestión del gas y el petróleo.

"Esperamos que las declaraciones del Ministro de Hidrocarburos boliviano, Andrés Soliz Rada, en la que acusaba a Petrobras y BP de daños ambientales en sus prácticas extractivas en Bolivia, hagan cambiar radicalmente la política de hidrocarburos de ese país", añade el comunicado.

En otro sentido, Ecologistas en Acción rechaza la actuación del Gobierno español a raíz de la declaración de nacionalización de las reservas, "una actuación que ha ido, en todo momento, encaminada a preservar los intereses de Repsol-YPF en Bolivia".

"En primer lugar no debemos olvidar que Repsol-YPF a quien beneficia es a su accionariado, --del cual más del 50% no es capital de empresas o particulares españoles, y, obviamente, entre el accionariado no se encuentra más que un ínfimo porcentaje de la población española", argumentan. En ese sentido se preguntan si "debe ponerse en marcha toda la maquinaria diplomática española para defender los intereses privados de un reducidísimo grupo de personas".

La ONG también se plantea si la defensa de los intereses de ese "reducidísmo grupo de accionistas de Repsol-YPF, --que gozan de una situación económica nada precaria--, es legítima frente al intento de salir de la pobreza de amplias capas sociales bolivianas".

A su juicio, el Gobierno español "haría mucho mejor si dirigiese sus esfuerzos al cumplimiento del Protocolo de Kioto, la reducción de la movilidad motorizada, el ahorro energético o la sustitución de combustibles fósiles por energías renovables, en lugar de apoyar a una empresa petrolera".