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LA PAZ, 8 May. (Notimérica/EP) -
Los suboficiales y sargentos que estuvieron movilizados y presentaron su solicitud de reconsideración para ser reincorporados a las Fuerzas Armadas de Bolivia, recibirían una sanción de 24 horas de arresto, entre otras sanciones, antes de reincorporarse a sus respectivos batallones, según ha informado la directora de Comunicación Social del Ejército, la coronel Sarah Aramayo.
"Esa solicitud está siendo analizada en el Tribunal de Personal, de ahí les van a dar su resolución indicando que queda sin efecto su retiro obligatorio y de acuerdo a la gravedad de la falta serán sancionados. Van a tener seguramente unas 24 horas de arresto o una cosa así que no va incidir de gran manera la continuidad de su carrera dentro de las Fuerzas Armadas", ha apostillado Aramayo.
Poco antes, el director de Comunicación de la Armada Boliviana, Javier Torrico, confirmó que todo el personal de este cuerpo militar se ha reincorporado "al cien por cien" y ha afirmado que la situación es "similar" en los otros, tras la huelga de suboficiales y sargentos de las últimas semanas.
"El personal se incorporó al cien por cien y tengo entendido que es una situación similar en todas las fuerzas", ha dicho en una entrevista concedida a una televisión boliviana, según ha informado la agencia de noticias ABI.
También ha aclarado que no ha habido acuerdos, sino que simplemente se han comprometido a abordar los temas propuestos por parte de los suboficiales y sargentos, entre ellos la revisión de los "retiros obligatorios" y la reforma de la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas (LOFA).
LA PROTESTA
El conflicto en los cuerpos castrenses comenzó el pasado 3 de abril, cuando suboficiales y sargentos presentaron un anteproyecto para reformar la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas, con el fin de "descolonizarlas" y acabar con la discriminación.
Ante la indiferencia de las autoridades bolivianas, el pasado 21 de abril unos 1.000 militares, todos de bajo rango, de los 9.000 que integran las Fuerzas Armadas, iniciaron una huelga indefinida y marcharon por La Paz.
Los militares de bajo rango, en su mayoría de origen indígena, exigieron las mismas oportunidades de promoción interna, formación continua y el mismo acceso a los programas de seguridad social y sanidad que los altos cargos castrenses.
En respuesta a la protesta, el Alto Mando dio el "retiro obligatorio" a 715 suboficiales y sargentos que a lo largo de la semana pasada ha ido readmitiendo paulatinamente.