Publicado 04/11/2019 23:14

Bolivia.- Maduro resta importancia al ultimátum contra Morales: "a mí me han dado como diez este año"

MADRID, 4 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha restado importancia al ultimátum de la oposición al presidente de Bolivia, Evo Morales, para que dimita este lunes y ha recordado que a él ya le han puesto varios plazos de eses estilo.

Maduro se ha centrado al presidente cívico de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho. "Le dio (Camacho) un ultimátum a Evo de 48 horas. Se parece mucho a los ultimátum que me han dado a mí, le dije a Evo. A mí me han dado este año como 10 ultimátums: 'Maduro 24 horas te vas o te tumbamos'. Ven y túmbame pues le digo yo, porque no van a tumbar a Evo", ha destacado el dirigente 'chavista'.

Maduro ha realizado estas declaraciones durante la clausura del Encuentro Antiimperialista de Solidaridad por la Democracia y contra el Neoliberalismo celebrado en La Habana, Cuba, en la que ha denunciado que la derecha boliviana es racista y fascista, por lo cual es "peor que la venezolana".

En concreto ha criticado a Camacho por hacer referencia al narcotraficante Pablo Escobar por llevar una agenda de traidores. "Este señor Camacho en Santa Cruz dijo hace dos días que le iba a ser como Pablo Escobar Gaviria, que iba a notar en su libreta la nombre de todos los traidores a Bolivia porque él no los iba a perdonar, los iba a perseguir hasta el final", ha indicado Maduro, quien calificó esa actitud de Camacho como fascista y nazi.

Según Maduro, el propio Evo Morales le dijo que derrotaría a la "amenaza facista". "Todos cuenten con que el indio Evo va a resistir y va a triunfar esta amenaza fascista, así me dijo él", ha remachado.

Además, Maduro ha instado a los pueblos originarios de Bolivia, mineros, campesinos y universitarios a que salgan todos los días a la calle para respaldar a Morales.

ULTIMÁTUM A MORALES

Morales pidió el pasado jueves a manifestantes de ambos bandos que cesaran las protestas para facilitar la auditoría. Sin embargo, los llamados Comités Cívicos, vinculados a la oposición, le dieron un ultimátum para que dimita antes de las 19.00 (22.00 horas en la España peninsular) este 4 de noviembre.

Manifestantes opositores se han concentrado este lunes frente a instituciones públicas de las ciudades de Santa Cruz, Cochabamba, Sucre y La Paz y la capital ha amanecido nuevamente con cortes de carreteras.

Así las cosas, Morales ha convocado a una reunión de urgencia a los líderes de la Central Obrera Boliviana (COB) y de la Coordinadora Nacional por el Cambio (CONALCAM) para estudiar la respuesta del oficialismo a los Comités Cívicos, según informa la prensa local.

CRISIS ELECTORAL

La crisis se desató la noche del 20 de octubre por la repentina suspensión de la transmisión de los resultados de las elecciones presidenciales celebradas ese día justo cuando obligaban a una segunda vuelta entre Morales y Mesa.

El final del escrutinio ha adjudicado la victoria en primera vuelta a Morales, pero Mesa cree que los resultados oficiales son fruto de un "fraude gigantesco". En un primer momento reclamó una segunda vuelta, pero ahora pide directamente la anulación y repetición de las elecciones presidenciales.

En estos días, ambos bandos han llamado a la movilización de sus simpatizantes, lo cual ha derivado en enfrentamientos en las calles y quema de tribunales electorales. Al menos dos personas han muerto y más de 190 han sido detenidas.

En este contexto, Morales ha accedido a que la Organización de Estados Americanos (OEA) lleve a cabo una auditoría electoral que comenzó el jueves y cuyos resultados --de carácter vinculante-- se conocerán en doce días, pero Mesa la ha rechazado como un acuerdo "unilateral" entre el y la OEA que no ha tenido en cuenta a la oposición.