Actualizado 26/09/2006 05:48

Bolivia.- Puesta en libertad la ex directora del Banco Central de Bolivia tras lo que ella llama una "cacería de brujas"


LA PAZ, 26 Sep. (EP/AP) -

La ex gerente general del banco Central de Bolivia, Marcela Nogales, quedó el lunes en libertad, tras un proceso que sus defensores califican de "cacería de brujas" supuestamente amparada por el gobierno del presidente Evo Morales.

"Ha terminado esta injusticia y esta detención ilegal de 66 días. Me voy a quedar a demostrar que no he cometido ningún delito y que soy inocente", declaró Nogales a periodistas que la esperaban en la puerta del penal.

La abogada Audalia Zurita informó a los medios de comunicación que su patrocinada, Nogales, salió de la prisión en la que permanecía a a primera hora de la tarde.

Las autoridades judiciales le concedieron desde el jueves la libertad bajo fianza y arraigo, pero aparentemente por la intervención al día siguiente del congresista René Ramos, del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) se demoró el cumplimiento de la resolución judicial. Ramos criticó el viernes ante la prensa la decisión de los jueces.

Nogales pagó la fianza equivalente a unos 9.800 euros desde entonces, con tal de terminar la reclusión en la que estuvo durante más de dos meses, indicaron sus abogados.

La ex gerente del BCB ha sido acusada por el fiscal Milton Mendoza de permitir de forma ilegal que se retiraran fondos de las depósitos del banco para que el régimen de Gonzalo Sánchez de Lozada (2002-2003) reprimiera violentamente las manifestaciones que concluyeron en su derrocamiento en octubre del 2003 y que dejaron 60 muertos.

La acusación de Mendoza señala que fueron sustraídos cerca de un millón y medio de euros del banco y pretende también la detención del ex presidente del BCB, Juan Antonio Morales, quien no tiene parentesco alguno con el presidente.

Nogales sostiene como parte de su defensa que no tenía atribuciones para evitar la salida del dinero.

Audalia Zurita, Juan Antonio Morales, analistas e incluso el diario estadounidense 'Wall Street Journal' catalogaron como una "cacería de brujas" la persecución emprendida contra los ex funcionarios.