BOLIVIA, 20 Oct (EUROPA PRESS)
Rodrigo Paz se alza con la victoria en las elecciones bolivianas, marcando el inicio de una nueva era en Bolivia durante la celebración de su bicentenario como Estado independiente. Con un 54 por ciento de los votos, derrotó a Jorge Tuto Quiroga en un contexto de crisis económica severa, caracterizada por la escasez de combustibles, dólares y un déficit elevado. Este triunfo se da en un momento clave para Bolivia, que se aleja de casi dos décadas bajo la influencia del Movimiento al Socialismo (MAS).
Originario de Santiago de Compostela y con 58 años, Paz se crió en el exilio durante el mandato de sus padres. Inició su trayectoria política como diputado nacional y más tarde destacó como alcalde de Tarija entre 2015 y 2020, donde se labró una reputación de líder moderado y capaz de diálogo. Su gestión en Tarija se enfocó en la modernización de la región a través de importantes obras de infraestructura, pese a enfrentar acusaciones de irregularidades que finalmente fueron desestimadas por la Justicia.
Recientemente, desde su escaño en el Senado, Paz se posicionó como un crítico del presidente saliente, Luis Arce, prometiendo durante su campaña tendencia la mano a diversos sectores en un período de intensa agitación social. Ahora, como presidente electo, enfrentará el desafío de manejar una profunda crisis económica y restablecer la credibilidad en las instituciones del país, particularmente en el sistema de justicia.
También deberá atender las demandas históricas de descentralización y autonomía de recursos en diferentes regiones de Bolivia, sin subestimar el impacto residual de la agenda del MAS en algunas áreas.
A nivel internacional, se anticipa que bajo la presidencia de Paz, Bolivia redefinirá sus relaciones exteriores, posiblemente distanciándose de aliados clave como Venezuela y buscando estrechar lazos con países como Estados Unidos, Israel y Argentina, quienes ya han felicitado a Paz por su reciente victoria electoral. Este cambio promete inaugurar un capítulo distinto en la política boliviana, tanto interna como externamente.