MADRID, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Abogacía General de la Unión (AGU) ha pedido al Tribunal Superior Electoral (TSE) que rechace la propuesta de investigar al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, por supuestos tratos de favor en el Ministerio de Educación, después de que el exministro Milton Ribeiro reconociera una suerte de gabinete paralelo.
Para la AGU el nombre de Bolsonaro ha sido incluido de manera "indebida", a pesar de que Ribeiro señaló en una conversación que le había pedido que recibiera en su despacho a los dos pastores evangélicos que más tarde se encargaron supuestamente de distribuir fondos del ministerio a cambio de favores, según unos audios revelados en la prensa brasileña.
La propuesta fue presentada ante el TSE por el Partido de los Trabajadores (PT), que pidió investigar tanto a Ribeiro como a Bolsonaro por abuso de poder y desvío de fondos públicos, ya que la gestión de las partidas presupuestarias de la cartera de Educación "ha sido amañada" con el fin de ayudar a la reelección del presidente.
La AGU afirma que el PT no cuenta con "elementos de hecho ni pruebas mínimas" que sostengan que Bolsonaro cometió un acto ilícito, ya que los audios publicados por el diario 'Folha de Sao Paulo' solo reflejan una serie de diálogos en los que "terceros hacen mención indebida del nombre del presidente".
En aquella grabación se escucha a Ribeiro en una reunión con alcaldes asegurar que, a petición del presidente Bolsonaro, son dos pastores evangélicos --Gilmar Santos y Arilton Moura-- quienes deciden cómo repartir el presupuesto del Fondo Nacional de Desarrollo de Educación (FNDE) del ministerio.
A raíz de esta y otras publicaciones en las que se hacía referencia a una suerte de gabinete paralelo dentro del Ministerio de Educación, varios fueron los alcaldes y autoridades locales que denunciaron que Santos y Moura habían exigido sobornos a cambio de liberar estas partidas del FNDE.
A finales de marzo, la Policía Federal, a petición de la Procuraduría General, comenzó una investigación por estos hechos, que el Gobierno sostiene ya vienen siendo investigados desde 2021 por iniciativa del propio Ministerio de Salud.
Cuestionado por esta grabación, Ribeiro, que fue uno de los nueve cambios ministeriales dentro de la última crisis de gobierno, negó la mayor y aseguró que el presidente no pidió nunca tal cosa. Sin embargo, el PT defiende que se sirvió de esta cartera para "impulsar la candidatura y los deseos políticos" de Bolsonaro.