MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha reivindicado este jueves el papel del Gobierno en la Amazonía brasileña, a pesar de los fuertes incendios forestales registrados, en un intento de acabar con las opiniones "distorsionadas" sobre la política medioambiental de su Administración.
En una reunión del MERCOSUR realizada por videoconferencia, ha señalado que el Gobierno "seguirá hablando con diferentes interlocutores para deshacer las opiniones distorsionadas sobre Brasil y exponer las acciones de preservación que se han llevado a cabo a favor de la protección de la selva amazónica y el bienestar de las poblaciones indígenas".
Sus palabras han tenido lugar un día después de que se publicaran los últimos datos sobre los incendios forestales en la zona. El Instituto Nacional de Investigación Espacial (INPE) ha alertado de que la cifra de incendios en la Amazonía registrada en junio fue la más alta desde 2007.
El INPE ha señalado que se ha producido un aumento del 19,6 por ciento de los incendios en comparación con el mismo mes del año pasado. Para ello, se ha basado en imágenes de satélites. En junio de 2020 se constataron 2.248 focos activos, mientras que en 2019 fueron 1.880. El promedio histórico para el mes de junio es de 2.724 focos activos en el bioma amazónico, según informaciones del portal de noticias G1.
El Gobierno brasileño ha sido duramente criticado por políticos, activistas y organizaciones no gubernamentales por sus políticas ambientales. Sin embargo, Bolsonaro ha hecho un llamamiento a todos los presidentes para que "instruyan a sus negociadores a cerrar los acuerdos comerciales". "Actuemos con la firme intención de prepararlos para firmar este semestre", ha dicho.
"Al mismo tiempo, nuestro Gobierno continuará el diálogo con diferentes interlocutores para deshacer opiniones distorsionadas sobre Brasil y exponer la preservación de las acciones que hemos tomado a favor de la protección de la selva amazónica y el bienestar de las poblaciones indígenas", ha manifestado.
El acuerdo de libre comercio entre MERCOSUR y la Unión Europea concluyó en 2019, después de 20 años de negociaciones. Para entrar en vigencia, el acuerdo debe ser ratificado por los parlamentos de los países involucrados. Algunos países europeos han afirmado que la posición del Gobierno de Bolsonaro sobre el medio ambiente es un obstáculo para ratificarlo.