NUEVA YORK, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
Un experto en Derechos Humanos de Naciones Unidas expresó este martes su preocupación por los desalojos que se están llevando a cabo en varias ciudades de Brasil de cara al Mundial de Fútbol de 2014 y a los Juegos Olímpicos de 2016.
"Estoy particularmente preocupado por la falta de transparencia, la consulta, el diálogo, la negociación justa y la participación de las comunidades afectadas en los procesos relativos a los desalojos realizados o previstos antes de la Copa del Mundo y los Juegos Olímpicos", indicó la Relatora Especial para el Derecho a la Vivienda Adecuada, Raquel Rolnik.
Según Rolnik, los desplazamientos y desalojos podrían dar lugar a violaciones de los Derechos Humanos en diferentes ciudades, como Sao Paulo, Río de Janeiro, Belo Horizonte, Curitiba, Porto Alegre, Recife, Natal y Fortaleza.
La experta de la ONU advirtió de que se han ejecutado desalojos sin que se les de tiempo suficiente a las familias afectadas a proponer y discutir alternativas, y no se les han ofrecido planes adecuados para reubicarles. "No se presta suficiente atención al acceso a la infraestructura, los servicios y los medios de subsistencia en los sitios de reubicación", puntualizó.
La Relatora Especial también expresó su preocupación por la ínfima compensación que se ofrece a las comunidades afectadas, lo que es aún más notable dado el incremento de valor de bienes raíces en lugares donde se están construyendo edificios relacionados con los eventos deportivos. "La compensación puede ser insuficiente por la falta de vivienda y la formación de nuevos asentamientos", lamentó.
Rolnik pidió a las autoridades federales, estatales y municipales que participan en los proyectos de la Copa del Mundo y los Juegos Olímpicos que inicien un diálogo transparente con la sociedad brasileña, especialmente en los sectores de la población directamente afectada.
"Las autoridades en todos los niveles deben poner fin a los desalojos previstos hasta que se asegure un diálogo y una negociación", afirmó.
"El Gobierno debería adoptar un plan legal para garantizar que la celebración de la Copa del Mundo y los Juegos Olímpicos tiene un impacto positivo social y ambiental y se evitan las violaciones de los Derechos Humanos, incluyendo el derecho a una vivienda adecuada", concluyó.