MADRID, 12 Oct. (EUROPA PRESS) -
Más de diez personas han muerto por un ataque perpetrado por hombres armados en la provincia burkinesa de Oudalan, situada en el norte del país africano, en un nuevo episodio de la creciente violencia que atraviesan varias zonas del país y que ha provocado en solo tres meses casi 270.000 desplazados.
El último incidente tuvo lugar el viernes por la tarde en la principal mezquita de localidad de Salmossi, según fuentes de los servicios de seguridad citadas por el portal 'infowakat.net'. Los asaltantes permanecieron en la zona un tiempo después de perpetrar el ataque.
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) elevó el viernes a 486.000 la cifra total de desplazados internos en Burkina Faso, mientras que otros 16.000 burkineses se han refugiado en los países vecinos. En el último año, según dicha agencia, más de 500 civiles han muerto en 472 ataques y operaciones militares.
Las trece regiones del país acogen a desplazados por la violencia, mientras que 1,5 millones de personas necesitan ayuda humanitaria urgente, al igual que los 31.000 refugiados malienses, que también se están viendo afectados por la situación, ha indicado Mbogori.