Publicado 08/07/2020 19:50

Burkina Faso.- EEUU advierte a Burkina Faso de que podría suspender su cooperación por supuestos abusos de sus fuerzas

Burkina Faso.- EEUU advierte a Burkina Faso de que podría suspender su cooperaci
Burkina Faso.- EEUU advierte a Burkina Faso de que podría suspender su cooperaci - GETTY IMAGES / POOL - Archivo

MADRID, 8 Jul. (EUROPA PRESS) -

Estados Unidos ha advertido este miércoles al Gobierno de Burkina Faso de que podría suspender su ayuda a nivel de seguridad si las autoridades no toman medidas contra las supuestas violaciones cometidas por sus fuerzas, incluidas denuncias sobre ejecuciones de civiles.

El vicesecretario de Estado de Estados Unidos para Asuntos Africanos, Tibor Nagy, ha descrito como "muy preocupante" el informe publicado durante la jornada por Human Rights Watch (HRW) sobre la presunta ejecución de al menos 180 personas en la localidad de Djibo (norte).

Los fallecidos, todos hombres, pertenecerían a la etnia peul o fulani, un grupo al que en los países del Sahel se tiende a vincular con los grupos yihadistas que operan en la región. Muchos de ellos tenían los ojos vendados, estaban maniatados y habían recibido disparos, en ocasiones en la cabeza.

"Las autoridades burkinesas deben hacer más para evitar estos abusos y hacer que los responsables rindan cuentas. La asistencia de seguridad estadounidense no puede continuar si no hay medidas", ha dicho a través de un mensaje publicado en su cuenta en la red social Twitter.

Por su parte, la Embajada estadounidense en Uagadugú ha mostrado su "profunda preocupación" por "el continuado y creciente número de denuncias de abusos y ejecuciones extrajudiciales por parte de las fuerzas de seguridad burkinesa, incluidas las documentadas por HRW".

Así, ha aplaudido el compromiso del presidente del país, Roch Marc Christian Kaboré, y los jefes de Estado del G5 Sahel --integrado por Burkina Faso, Chad, Malí, Mauritania y Níger-- para "investigar las acusaciones sobre abusos de los Derechos Humanos y hacer rendir cuentas a los responsables".

"Pedimos firmemente al Gobierno que lance inmediatamente una investigación independiente, puntual y totalmente documentada sobre las nuevas acusaciones y que, si éstas se demuestran, se garantice una total rendición de cuentas", ha manifestado en su comunicado.

La Embajada ha resaltado que "las organizaciones extremistas violentas amenazan y matan a miembros de las fuerzas de seguridad y ciudadanos por igual, sus tácticas y métodos son aborrecibles". "Ante estas amenazas, es fundamental que el Gobierno cumpla los máximos estándares de conducta y cumpla con la responsabilidad del Estado de proteger a sus ciudadanos", ha explicado.

"Si fracasa a la hora de hacerlo, debe hacer que los responsables rindan cuentas por sus crímenes. Nadie está por encima de la ley", ha dicho, antes de hacer hincapié en que está "hombro con hombro" con la población burkinesa en su lucha contra el extremismo violento.

"El respeto de los Derechos Humanos es el pilar de una democracia que triunfará ante sus enemigos", ha remachado la Embajada en su comunicado, que ha sido citado por Nagy junto a su mensaje en Twitter.

INCREMENTO DE LOS ATAQUES

El Ministerio de Defensa burkinés ha reaccionado al informe de HRW y ha apuntado que las muertes coincidieron con un aumento de los ataques por parte de los grupos yihadistas y por tanto podrían haber sido estos quienes hubieran cometido los asesinatos, usando uniformes y material robado al Ejército.

HRW ha venido haciendo seguimiento desde 2016 los incipientes ataques de las filiales de Al Qaeda y Estado Islámico en Burkina Faso, y sobre todo en la región de Sahel, fronteriza con Malí y Níger, documentando la muerte de cientos de civiles en estas acciones.

También ha documentado ejecuciones extrajudiciales de varios cientos de hombres, presuntamente a manos de las fuerzas de seguridad, por su presunto apoyo a estos grupos, incluidos 31 hombres hallados ejecutados después de ser detenidos en Djibo el pasado 9 de abril.

Burkina Faso ha registrado un fuerte aumento de ataques yihadistas en los últimos años, obra tanto de la filial de Al Qaeda como de la de Estado Islámico en la región. Los abusos de las fuerzas de seguridad contra la población han ayudado a estos grupos en sus tareas de reclutamiento.

Dicha actividad ha contribuido también a incrementar la violencia intercomunitaria y ha hecho que florecieran grupos de autodefensa, a los que el Gobierno burkinés ha sumado en los últimos meses a voluntarios para que ayuden en la lucha antiterrorista. Más de 800.000 personas se han visto desplazadas en el país como resultado de todo ello