Las autoridades tailandesas acusan al Ejército camboyano de disparar artillería pesada contra viviendas civiles
MADRID, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro camboyano, Hun Manet, ha agradecido este domingo al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sus esfuerzos para un alto el fuego entre Camboya y Tailandia, después de que en la víspera el inquilino de la Casa Blanca asegurara que los líderes de ambos países habían confirmado su voluntad de alcanzar un cese de hostilidades tras varios días de ataques en la frontera común.
Manet ha "dejado claro" a Trump que Camboya está de acuerdo con la propuesta de alto el fuego inmediato e incondicional después de que el dirigente estadounidense expresara su "deseo de evitar una guerra o combates que provoquen numerosas muertes y heridos", así como su deseo de que haya "paz entre ambos países". "Siempre se ha esforzado por mediar y ha logrado resolver conflictos en numerosos países del mundo", ha asegurado.
"Quisiera agradecer al honorable presidente Trump su iniciativa y mediación para lograr un alto el fuego inmediato y la paz entre Camboya y Tailandia. Este excelente resultado contribuirá a proteger la vida de muchos soldados y civiles que podrían haber perdido la vida o resultado heridos en los combates, y ayudará a cientos de miles de refugiados a regresar a sus aldeas para continuar con su vida cotidiana de forma segura y pacífica", reza un comunicado.
Manet ha explicado que el sábado por la noche mantuvo una conversación telefónica con Trump sobre los enfrentamientos armados en la frontera, en la que el mandatario estadounidense le "comunicó la positiva noticia de que la parte tailandesa también estaba de acuerdo" con su propuesta "de un alto el fuego inmediato": "Esta es una noticia positiva para los soldados y el pueblo de ambos países", ha asegurado.
"Espero que la parte tailandesa no cambie de postura, como hizo con la iniciativa de coordinación del primer ministro (de Malasia) Anwar Ibrahim el 24 de julio", ha indicado, en referencia al fracaso de un primer intento de alto el fuego mediado por el también presidente en funciones de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN), después de que Tailandia declinara la propuesta alegando "ataques indiscriminados contra territorio tailandés".
En este sentido, el 'premier' camboyano ha ordenado a su ministro de Exteriores, Prak Sokhonn, que aborde la situación con su homólogo estadounidense, Marco Rubio, y que "colabore en coordinación" con el jefe de la diplomacia tailandesa "para implementar rápidamente los principios acordados con el objetivo de poner fin a las bajas de soldados y civiles de ambos lados".
Por su parte, el Gobierno tailandés --que ha cifrado en trece los civiles muertos de su lado-- ha acusado al Ejército camboyano de haber disparado artillería pesada alrededor de las 4.30 horas (hora local) contra viviendas civiles en la provincia de Surin tras una "campaña de desinformación lanzada por Camboya que afirmaba falsamente que Tailandia había disparado primero".
"Tailandia condena enérgicamente esta flagrante y reiterada violación del Derecho Internacional e insta a Camboya a cesar de inmediato los ataques contra objetivos civiles. No se podrá alcanzar un cese de hostilidades mientras Camboya muestre una grave falta de buena fe y viole reiteradamente los principios básicos de los Derechos Humanos y el Derecho Internacional", ha expresado.
Así, a través del Ministerio de Exteriores, ha remarcado que "se reserva el derecho inherente a la legítima defensa, consagrado en el artículo 51 de la carta de Naciones Unidas, y ha respondido contra objetivos militares limitados para neutralizar las amenazas" a su "soberanía nacional e integridad territorial".
Por último, la cartera ministerial ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional "para que condene estos actos inhumanos y reprensibles que está cometiendo Camboya y que no tienen cabida en un orden internacional basado en normas".
Los enfrentamientos estallaron horas después de que Tailandia anunciara una reducción de sus lazos diplomáticos con Camboya tras denunciar que cinco soldados resultaron heridos a causa de la explosión de una mina antipersona en la provincia limítrofe de Ubon Ratchathani (este), un hecho del que Camboya ha dado una versión diferente, después de meses de tensiones.
Las relaciones entre las partes se habían deteriorado después de que el pasado 28 de mayo un soldado camboyano muriera a manos de las fuerzas tailandesas en las proximidades de Preah Vihear, situado en una zona en disputa entre los dos países, sin que los contactos desde entonces para reducir las tensiones hayan llegado a buen puerto.