MADRID, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Camerún liberaron el miércoles a 22 seguidores del opositor Movimiento para el Renacimiento de Camerún (MRC) en la capital, Yaundé, según han recogido este jueves los medios locales.
Según las informaciones del portal local de noticias Cameroun Web, todos ellos tendrán que comparecer el 18 de noviembre ante un tribunal para responder de los cargos que pesan contra ellos, derivados de su participación en protestas contra el Gobierno.
Christopher Ndong, abogado de los liberados, ha denunciado en declaraciones a la cadena de televisión británica BBC que otros 60 seguidores del MRC siguen encarcelados por "cargos falseados".
El líder del MRC, Maurice Kamto, quien fuera el principal rival del presidente, Paul Biya, en las presidenciales de 2018, fue liberado el 5 de octubre junto a numerosos partidarios, tras nueve meses detenido por protestar contra el presunto fraude electoral.
Kamto y más de 90 militantes de su partido fueron detenidos en enero por orden de un tribunal militar de Yaundé por cargos de "insurrección".
Todos ellos habían sido acusados de convocar manifestaciones ilegales contra la reelección de Biya en las elecciones presidenciales de 2018, que describieron como "atraco electoral", y contra la crisis en la región anglófona del país.
La liberación de Kamto tuvo lugar un día después de que Biya decidiera suspender los procesos legales contra más de 300 detenidos. El presidente tomó la decisión horas después del final del diálogo nacional que convocó para tratar de poner fin al sangriento conflicto separatista entre las dos regiones de habla inglesa en el oeste del país.
Lo que en 2016 empezaron siendo protestas pacíficas de los habitantes de estas regiones, otrora colonias británicas pero que decidieron unirse al Camerún francés, por su supuesta marginación por parte del Gobierno central, derivó en una dura represión a raíz de la autoproclamación de la independencia de Ambazonia el 1 de octubre de 2017.
Desde entonces, los grupos armados han proliferado y el apoyo a los separatistas, hasta entonces bastante marginal, se ha visto acrecentado. El Gobierno ha respondido mediante una dura represión durante la que las organizaciones de Derechos Humanos han acusado a las fuerzas de seguridad de cometer atrocidades.