Publicado 30/01/2019 21:12

Canadá reduce a la mitad su presencia diplomática en La Habana por los supuestos ataques sónicos

Embajada de Canadá en La Habana
REUTERS / ALEXANDRE MENEGHINI - Archivo

   MADRID, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -

   El Ministerio de Exteriores de Canadá ha anunciado este miércoles que ha decidido reducir a la mitad su presencia diplomática en La Habana después de detectar nuevos casos de los supuestos ataques sónicos sufridos por el personal desplegado en Cuba.

   "Además de revisar las medidas de seguridad ya implementadas por el Gobierno canadiense, hemos decidido reducir a la mitad el número de trabajadores canadienses en La Habana", ha anunciado el departamento que dirige Chrystia Freeland en un comunicado.

   El Ejecutivo de Justin Trudeau ha aclarado que "Canadá seguirá teniendo una Embajada en La Habana con un embajador" y que proporcionará servicios consulares "completos" en toda la isla caribeña. "Sin embargo, otros programas tendrán que ser ajustados en las próximas semanas", ha avanzado.

   También ha indicado que "no hay indicios de que los turistas canadienses en Cuba estén en peligro", si bien les ha aconsejado que se mantengan atentos a los avisos de viaje del Ministerio de Exteriores. "Se seguirá prestando servicio consular en La Habana, Varadero y Guardalavaca", ha apostillado.

   Estas medidas se deben a que las pruebas médicas realzas al personal canadiense en La Habana desde el pasado mes de noviembre, cuando se confirmó el último caso, han revelado que "otros empleados tienen síntomas consistentes con los detectados en otros afectados".

   Esto eleva el número de afectados, contando tanto a los empleados canadienses como sus familiares, a 14. "Todos ellos seguirán recibiendo la atención médica necesaria", ha asegurado el Ministerio de Exteriores, subrayando que "la salud y seguridad del personal diplomático y sus familias es una prioridad".

   El país norteamericano ha indicado que "seguirá investigando las potenciales causas de los extraños síntomas experimentados por parte del personal en La Habana", cuya causa aún se desconoce, si bien ha recalcado que sus relaciones con Cuba siguen siendo "positivas y constructivas".

   Diplomáticos canadienses y estadounidenses en La Habana comenzaron a quejarse de mareos, náuseas y dolores de cabeza durante la primavera de 2017. Meses después, Estados Unidos redujo el tamaño de su misión diplomática en la capital cubana --pasando de más de 50 empleados a 18--.

   Las pesquisas llevadas a cabo de forma conjunta por Estados Unidos y Cuba no han logrado identificar el origen de estos problemas de salud y Canadá tampoco ha llegado a ninguna conclusión. La Casa Blanca ha anunciado una investigación propia.