Publicado 21/04/2021 14:15

Chad.- El hijo de Déby es nombrado presidente y "jefe supremo" del Estado Mayor del Ejército de Chad

La 'hoja de transición' contempla una transición de 18 meses que podría ser prorrogada

MADRID, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -

Mahamat Idriss Déby, hijo del fallecido presidente de Chad, Idriss Déby, muerto el martes tras resultar herido en combates con los rebeldes del Frente para la Alternancia y la Concordia en Chad (FACT), ha sido nombrado presidente y "jefe supremo" del Estado Mayor del Ejército del país a raíz de la 'hoja de transición' aprobada por la junta militar creada tras la muerte del mandatario.

El hijo de Déby, de 37 años, fue nombrado el martes presidente del Consejo Militar de Transición (CMT), que anunció inmediatamente después la disolución del Gobierno y del Parlamento y el inicio de un periodo de transición de 18 meses de cara a la celebración de elecciones para "garantizar la continuidad del Estado".

Así, el hasta ahora jefe de la Guardia Presidencial, considerado como un posible sucesor de su figura en el país, pese a no ser una monarquía, acumula una gran cantidad de poder, dado que, según el documento, encabeza "el CMT, el Consejo de Ministros y los consejos y comités superiores de Defensa".

Asimismo, tendrá autoridad para "promulgar las leyes adoptadas por el CMT" y pedir una revisión de las mismas de cara a su ratificación, además de nombrar a los embajadores y a los principales cargos civiles y militares del país, incluidos los integrantes del Ejecutivo, además de negociar y aprobar los tratados internacionales.

Esta 'hoja de transición' sustituye a la Constitución del país "y a todos los textos anteriores", según al artículo 92 del documento, que recoge en su epígrafe anterior que el texto "será caduco una vez se adopte la nueva Constitución a través de un referéndum", según ha recogido el portal de noticias Alwihda.

El texto refleja además un matiz respecto al anuncio sobre un periodo de transición de 18 meses, al apuntar que "puede ser prorrogado una vez" por el CMT, que necesitará una mayoría de dos tercios. El CMT está integrado por catorce personas, al margen de Déby, todas ellas del círculo cercano del expresidente.

Por otra parte, establece que los tres órganos de esta transición son el CMT, el Consejo Nacional de Transición (CNT) y el Gobierno de Transición, si bien especifica que "el secretario general del Gobierno de Transición está bajo la autoridad del presidente del CMT para la coordinación del trabajo gubernamental".

DÉBY CONTROLA LOS NOMBRAMIENTOS

En este caso, resalta que "el presidente del CMT nombra y revoca a los miembros del Gobierno de Transición" y que "los miembros del CNT son designados por el presidente del CMT", lo que deja la composición de ambos organismos en manos de Mahamat Idriss Déby.

"El CNT está compuesto por 69 miembros designados por el presidente del CMT", indica en su artículo 57, antes de detallar en el artículo siguiente que contará con una cúpula integrada por un presidente, un vicepresidente, cuatro secretarios de sesiones, un cuestor y un cuestor adjunto.

Este organismo tendrá como objetivo "controlar la ejecución por parte del Gobierno de las decisiones y orientaciones del CMT, ejercer la función legislativa, velar por la defensa y la promoción de los Derechos Humanos y las libertades y examinar y adoptar el proyecto de Constitución y los textos legislativos".

Por otra parte, contempla la inmunidad para sus miembros y añade que "las sesiones den CNT serán públicas, salvo que se decrete que se celebren en privado", si bien el contenido de las sesiones deberá ser publicado en el Diario Oficial.

La 'hoja de transición' apunta que el CNT pondrá fin a sus funciones una vez se elija un Parlamento a través de las urnas y apunta que el presidente del CMT "se comunica con el CNT a través de mensajes que hay que leer y que no dan lugar a ningún tipo de debate".

En otro orden de cosas, recoge que "el poder judicial es independiente del poder ejecutivo y el poder legislativo" y que "la justicia se ejerce en el territorio en nombre del pueblo chadiano". Así, resalta que "defiende los derechos fundamentales de los ciudadanos".

DERECHOS Y LIBERTADES

El documento, compuesto por 95 artículos, recoge además que "Chad es una república independiente, soberana, laica, una e indivisible" y ratifica la bandera, el himno nacional y el francés y el árabe como lenguas oficiales del país africano.

Por otra parte, subraya que "los partidos políticos compiten a través del sufragio" y "se forman libremente y ejercen sus actividades en el respeto a las leyes", antes de destacar que "todo acto que atente contra la forma republicana y la laicidad del Estado, su soberanía, independencia o la unidad nacional es un crimen de alta traición y es castigado como tal".

"Las libertades y derechos fundamentales están reconocidos y su ejercicio garantizado a los ciudadanos en las condiciones y formas previstas por la ley", indica, al tiempo que incide en que "los chadianos de ambos sexos tienen los mismos derechos y deberes" y "son iguales ante la ley, sin distinción de raza, origen o religión".

"La persona humana es inviolable. Tiene derecho al respeto de su vida, su integridad física y moral, su identidad personal y a la protección de la intimidad de su vida privada y familiar", manifiesta el documento, que refleja que "ningún ciudadano debe ser sometido a tratos degradantes o humillantes ni a torturas".

Por otra parte, consagra "la libertad de opinión, expresión y conciencia" y añade que "las libertades de asociación, reunión, prensa y publicación están garantizadas". "La ley determina las condiciones de su ejercicio", recalca, antes de apuntar que igualmente se reconocen los derechos sindicales y a la huelga.

CRÍTICAS OPOSITORAS

La creación del CMT y la apertura de un proceso de transición encabezado por el hijo de Déby ha recibido críticas desde la oposición, entre ellos Saleh Kebzabo, quien ha apostado por un proceso de diálogo, algo por lo que ya abogó antes de las presidenciales del 11 de abril, en las que Déby obtuvo un sexto mandato.

"La Constitución prevé que sea el presidente de la Asamblea Nacional el que presida el destino del país en caso de vacancia y que se organicen elecciones en un plazo de 90 días", ha recordado, en declaraciones concedidas a la emisora Radio France Internationale.

De esta forma, ha defendido que, dado que el país ha celebrado recientemente elecciones --en las que llamó al boicot para denunciar la represión de Déby y la eliminación de candidaturas opositoras-- es posible volver a repetir el ciclo electoral sin incidencias.

Por último, Kebzabo ha incidido que "en todo caso, es absolutamente necesario e indispensable que se celebre un diálogo nacional", según ha recogido el portal chadiano de noticias Tchad Infos. Al llamamiento se ha sumado el Partido para las Libertades y el Desarrollo (PLD).

El PLD, encabezado por Mahamat Ahmad Alhabo, ha denunciado que "un grupúsculo de generales haya creado el CMT para acaparar el poder, violando las disposiciones constitucionales" y ha pedido "un diálogo inclusivo, único medio político para garantizar la cohesión nacional y la estabilidad de Chad", con apoyo de la comunidad internacional.

La muerte de Déby en plena ofensiva del FACT supone un duro golpe para la estabilidad del país y de la región, debido a la importancia del país en la lucha contra el terrorismo internacional en el Sahel y la cuenca del lago Chad.

El FACT destacó en un comunicado publicado tras el anuncio de la muerte de Déby que mantendrán su ofensiva y que están "en camino" hacia la capital del país, Yamena. Así, pidieron a la población unirse contra "la implacable dictadura" de Déby, quien estuvo en el poder desde 1990.

La coalición, que ha recibido el apoyo del también rebelde Consejo de Comando Militar para la Salvación de la República (CCMSR), destacó que "no puede haber una dinastía en el poder", pues Chad "no es una monarquía", en referencia al ascenso de Mahamat Idriss Déby.