SANTIAGO, 18 Jul. (de la corresponsal de EUROPA PRESS Claudia Riquelme) -
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, anunció hoy martes cambios históricos en la política de vivienda social para los más pobres, basados en la mejora de la calidad de los hogares y en la no segregación de quienes tienen menos recursos.
La mandataria hizo este anuncio pocas semanas después de que medios de comunicación locales denunciaran la entrega de casas de entre 6 y 12 metros cuadrados a ciudadanos en situación de extrema pobreza, en base a subsidios entregados por el gobierno anterior, presidido por el ahora ex mandatario Ricardo Lagos, y también tras varias décadas de dificultades en la política habitacional focalizada en los más pobres, relacionadas con la calidad y el tamaño de las viviendas.
Bachelet dijo que este nuevo plan estatal, cuya primera etapa se desarrollará durante los próximos cuatro años de su Gobierno, busca alcanzar metas como disminuir drásticamente el déficit habitacional del 20% de los más pobres del país, aumentar la superficie de las viviendas sociales y asegurar su calidad.
Asimismo, buscará revertir la segregación social en la ciudad, mejorar la cantidad de casas y barrios existentes, y seguir ayudando a los sectores medios que necesitan del apoyo del Estado para alcanzar su vivienda propia.
Asimismo, la nueva política habitacional buscará recuperar el patrimonio familiar, deteniendo el deterioro de las viviendas y sus entornos en un esquema participativo, así como la recuperación de barrios vulnerables y patrimoniales a través de reparaciones, ampliaciones y la mejora de las viviendas sociales.