Actualizado 04/04/2017 12:23

Bachelet firma el proyecto de ley para reformar la Constitución 'pinochetista'

La presidenta de Chile, Michelle Bachelet
GOBIERNO DE CHILE

SANTIAGO, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -

La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, ha firmado el proyecto de ley para reformar la Constitución, que data de la dictadura del general Augusto Pinochet, una de las grandes promesas con las que la líder izquierdista volvió al cargo, hace ya cuatro años, y que ha impulsado en la recta final de su mandato.

Bachelet ha estampado su rúbrica en el proyecto de ley para reformar el Capítulo XV de la Constitución, que versa precisamente sobre la enmienda de la Carta Magna, en una ceremonia solemne celebrada en el Patio de las Camelias del Palacio de La Moneda arropada por su equipo de ministros.

"Con esto abrimos al fin las puertas para que Chile pueda tener una Carta Magna que nos represente, que acoja nuestra diversidad y que nos dé las herramientas que necesitamos para nuestra vida en común", ha dicho la jefa de Estado, según informan los medios de comunicación locales.

Bachelet ha destacado que de esta forma cumple otra de sus promesas electorales: "elaborar una Constitución en democracia y junto a la ciudadanía". "Y seguiremos en la misma manera hasta el final. No vamos a fallarle a Chile, ni a nuestra democracia ni a nuestra historia", ha afirmado.

La mandataria ha explicado que, una vez completada la fase de participación ciudadana, en la que han intervenido más de 200.000 personas, arranca la "fase institucional". "Todos tenemos una gran responsabilidad: el Gobierno, el Parlamento, los partidos políticos, la sociedad civil... Y debemos estar a la altura", ha subrayado.

Bachelet ha propuesto crear una Convención Constitucional --una de las cuatro fórmulas posibles-- para lo cual necesita el voto de las dos terceras partes de diputados y senadores, como principal foro de discusión para elaborar la nueva Norma Fundamental. Sus integrantes y reglas de funcionamiento se regularán mediante Ley Orgánica.

"Es muy importante dejar claro que la forma y composición que tome la Convención Constitucional no está cerrada a ninguna alternativa y eso es parte central del debate que debe iniciar el Congreso con este proyecto de ley", ha enfatizado. "El camino al que invitamos con este proyecto es justamente ese, el de la apertura", ha remachado.

"El Congreso tiene desde ahora la gran oportunidad y la responsabilidad histórica de dar respuesta a lo que demanda nuestro desarrollo democrático. Tengo plena confianza en que no defraudarán a los ciudadanos, en que sabrán escuchar y en que todos terminarán por empujar en la misma dirección, la del Chile de todos y para todos", ha concluido.

'NO' DE LA OPOSICIÓN

La coalición opositora Chile Vamos ha criticado que el Gobierno haya lanzado la reforma constitucional en este momento, denunciando que se trata de un intento de influir en los comicios presidenciales y parlamentarias que se celebrarán este año en la nación suramericana.

"El Gobierno (...) utiliza electoralmente la Constitución para demagógicamente señalarle a los chilenos durante la campaña presidencial que la forma en la que se van a arreglar los problemas sociales de la ciudadanía es con un cambio constitucional, como si fuera una varita mágica", ha dicho el senador opositor Alberto Espina.

Espina ha avanzado que la bancada opositora en el Congreso no apoyará el proyecto de ley enviado por La Moneda porque "no tiene contenido". "No ha presentado ninguna propuesta de reforma constitucional. Lo único que el Gobierno genera cuando anuncia una reforma, que nunca envía al Parlamento, es incertidumbre", ha indicado.

En respuesta, la senadora socialista Isabel Allende ha considerado que la vía señalada por Bachelet "es la más inteligente" porque cuenta con "el nivel de indeterminación que permite abrir el debate". "Entiendo, por lo que dijo la presidenta que la ley definirá y que está todo abierto", ha señalado.