MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Sebastián Piñera ha invitado a la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michele Bachelet, a que personal de su oficina viaje a Chile para conocer de primera mano la situación en el país tras varios días de protestas antigubernamentales.
Así lo ha anunciado este jueves el ministro de Exteriores, Teodoro Ribera, quien ha dicho que Piñera "ha instruido a que se invite a la Alta Comisionada de Derechos Humanos para informarse en terreno de la situación existente" y se den facilidades de acceso a quienes envíe la antigua presidenta chilena.
El canciller ha precisado que el propio mandatario prevé llamar por teléfono a su antecesora, ahora jefa de Derechos Humanos de la ONU, "para ratificarle su disposición de facilitar la presencia de estas personas en Chile", según informa radio BioBío.
Además, La Moneda tiene el deseo de que al equipo de Bachelet se pueda sumar el director para América Latina de Human Rights Watch (HRW), el abogado chileno José Miguel Vivanco. "Nos interesa la máxima transparencia", ha asegurado el canciller.
Bachelet había expresado el lunes su preocupación por la situación en su país, del que fue presidenta durante dos mandatos no consecutivos, y había apelado al diálogo. Asimismo, defendió que "es esencial que todos los actos que han provocado lesiones y muerte, tanto por parte de las autoridades como de los manifestantes, sean sometidas a investigaciones independientes, imparciales y transparentes".
La jefa de Derechos Humanos de la ONU se refirió igualmente a las acusaciones de "uso excesivo de la fuerza por parte de algunos miembros de las fuerzas de seguridad y del Ejército", así como que "a algunos detenidos se les habría denegado el acceso a abogados, tal y como es su derecho, y que otros han sido maltratados en detención". También mencionó las decenas de miembros de las fuerzas de seguridad que han resultado heridos en los cinco días de protestas.
Por su parte, Vivanco también ha expresado su preocupación por las "imágenes de brutalidad policial" en su país. "El presidente Piñera debería dejar claro a las fuerzas de seguridad chilenas que tienen que respetar los Derechos Humanos y garantizar que los agentes implicados en abusos son investigados de forma inmediata e imparcial", sostuvo en un comunicado.
Piñera declaró el viernes el estado de emergencia en el país y desplegó incluso al Ejército a raíz de las violentas protestas desatadas inicialmente por la subida del precio del metro. Desde entonces, el Gobierno ha confirmado al menos 18 fallecidos, principalmente en incendios durante saqueos, aunque también algunos a manos de las fuerzas de seguridad.