SANTIAGO, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los rectores de las universidades chilenas agrupados en el Consejo de Rectores (CRUCh) han instado a los estudiantes a acabar con las protestas en los centros de educación superior con la toma de las instalaciones para restablecer "cuanto antes" las actividades académicas y rechazar la imposición de sus ideas mediante la violencia.
Los estudiantes vienen reclamando desde el inicio de 2011 una educación gratuita y de calidad en las universidades para ofrecer opciones a los estudiantes más necesitados. Según las propias asociaciones de estudiantes, la Universidad de Chile es la que más huelgas ha sufrido. Un total de 16 facultades de este centro están tomadas para reivindicar la mejora de la calidad de los centros.
En la capital, también sufren huelgas o están ocupadas la Universidad de Santiago (Usach), la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTEM) y la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación (UMCE). En otras zonas también hay centros ocupados, como en Valparaíso y otras regiones, como la Universidad de la Concepción (centro), la más antigua del país, fundada en 1919.
"Llamamos a los estudiantes, a sus familias y a las comunidades que integran nuestras universidades a reconstituir los espacios de diálogo y reflexión que nos permitan restablecer cuanto antes las actividades académicas y la más plena normalidad institucional, garantizando un clima de libertad y participación mediante el diálogo respetuoso", explicaron en un comunicado los rectores.
La asociación denunció que "el uso de la imposición unilateral o de la fuerza como medios de acción para impedir el derecho a trabajar y a estudiar constituyen prácticas contrarias a esos principios cívicos fundamentales", que acaban por dividir a las instituciones, "alteran el proceso formativo de miles de estudiantes y dañan gravemente a nuestras universidades".
"Cuando la protesta se traduce en paros y tomas que no tienen la debida articulación con las respectivas comunidades universitarias, sino que responden a intereses difusos o a disputas entre ellos, lo que se está haciendo es debilitar nuestras instituciones y, en consecuencia, a toda la educación superior pública", advirtieron, según medios locales.
ANTIDISTURBIOS EN LA UNIVERSIDAD
La firma del comunicado se ha producido en un momento en el que el Gobierno está siendo muy criticado por enviar a la Policía antidisturbios el pasado jueves a expulsar a un grupo de personas que ocupaban la Universidad de Chile. El rector de este centro, Víctor Pérez, denunció las prácticas de los carabineros a la hora de expulsar a los concentrados.
La portavoz del Gobierno, Cecilia Pérez, explicó que el Ejecutivo protegerá a los estudiantes, pero ha advertido que "el Gobierno no defiende a los delincuentes", ya que "el Gobierno, a través de las policías, persigue a los delincuentes".
El rector pidió explicaciones por la entrada de las fuerzas de seguridad en el edificio central de la Universidad, a pesar de que las autoridades lo han justificado por la presencia de personas con la cara tapada que lanzaron piedras a los agentes.
El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh), Andrés Fielbaum, advirtió de que "no hay ninguna forma de justificar cómo actuaron los carabineros". "Ellos arrasan y entran golpeando a todos los estudiantes que estaban a su paso, sin preocuparse de saber qué estaba haciendo ese estudiante", denunció, según medios locales.