Actualizado 16/07/2009 18:50

China y Australia se lanzan amenazas mutuas en caso Rio Tinto

Por Lucy Hornby

PEKIN (Reuters/EP) - Australia y China realizaron amenazas cruzadas el jueves a raíz del caso de espionaje de Rio Tinto al tiempo que Estados Unidos instó a Pekín a garantizar la transparencia y el trato justo para los empleados de compañías extranjeras.

A más de una semana de la detención de un ejecutivo australiano de Rio y tres de sus colegas chinos acusados de un espionaje relacionado al precio de las negociaciones de hierro, el ministro del Exterior de China advirtió a Australia sobre "avivar" el caso.

"Nos oponemos decididamente a cualquiera que avive deliberadamente este caso o intente interferir en la independencia judicial de China", señaló a la prensa el portavoz de la cartera Qin Gang.

El ministro de Relaciones Exteriores de Australia, Stephen Smith, señaló que no espera que se dañen las relaciones por el caso, pero advirtió que: "China necesita pensar sobre si su manejo de este tema tiene implicancias adversas para sí".

Las detenciones y la turbiedad general de las leyes de secreto de Estado ponen en potencial riesgo a los inversionistas cuando tratan con entidades estatales e información económica potencialmente sensible, un punto que manifestó el secretario del Comercio de Estados Unidos, Gary Locke, el jueves durante una entrevista a CNN.

"Estas son, por supuesto, de gran preocupación para los inversionistas estadounidenses y las compañías multinacionales en el mundo que tienen proyectos aquí", apuntó Locke.

"Necesitamos tener transparencia, tenemos que tener seguridad y confianza de que la gente que trabaja en estas compañías multinacionales (...) será tratada de manera justa", agregó.

El equipo de mineral de hierro de Rio Tinto en China manejaba detalles operacionales de los contratos a plazo, un ingrediente clave en la producción acerera, al igual que el seguimiento de información de mercado.

En una conferencia de prensa oficial luego esa mañana para entregar datos del segundo trimestre, el portavoz de la Oficina Nacional de Estadísticas Li Xiaochao, dijo que la filtración sería investigada pero casi dijo que constituye un "secreto de Estado".