HONG KONG, 21 Jun. (DPA/EP) -
El referéndum extraoficial celebrado este sábado por una coalición de 30 sindicatos y organizaciones estudiantiles en favor de una huelga general de protesta contra las autoridades ha sido anulado por quedar muy lejos del recabar el número de votos necesario para su legitimación.
Al término de la votación solo se han depositado 9.000 de las 60.000 papeletas necesarias para estudiar la opción de la huelga, concebida como una medida de último recurso contra la polémica ley de seguridad que prepara China sobre el territorio, y que podría restringir todavía más los derechos y libertades de sus habitantes, según la oposición.
De los votos recabados, un 95% votó a favor de la huelga mientras que un 98% se opuso a la ley de seguridad nacional.
Los sindicatos de Hong Kong han desempeñado un papel importante en el apoyo a los trabajadores durante el movimiento de protesta antigubernamental. A la amenaza que representa China hay que añadir que muchos trabajadores han expresado su insatisfacción con la respuesta del Gobierno local, liderado por Carrie Lam, tanto frente a las protestas como al coronavirus.
La polémica ley de seguridad que el Gobierno chino está ultimando para Hong Kong incluye el establecimiento de una "comisión para la defensa de la seguridad nacional" que se encargará de perseguir todas las actividades irregulares comprendidas en esta nueva y polémica normativa, entre ellas las consideradas como "secesión", "subversión" o "terrorismo", que Pekín tiene previsto aprobar en julio a pesar de la ola de críticas de la oposición local.
Esta ley, hay que recordar, supercede por completo a la normativa de Hong Kong estipulada por el propio Congreso del territorio, cuyo órgano ejecutivo ha sido incapaz de aclarar los detalles de la normativa y ha remitido constantemente a las autoridades de Pekín para cualquier duda al respecto, alegando falta de información.
Los detalles de la ley se han recogido en el sumario del pleno celebrado durante los últimos tres días por el Comité Permanente del Politburó del Partido Comunista chino, que abre este apartado con asegurando que la ley de seguridad nacional "respetará y protegerá los Derechos Humanos" acorde con la normativa local de Hong Kong, antes de advertir de que el poder último de interpretación reside descansará precisamente sobre el propio comité.
En lo que se refiere a la comisión, este organismo, que tendrá una sede física en el territorio, se encargará de "supervisar, dirigir y coordinar el cumplimiento de las obligaciones del Gobierno local hacia la seguridad nacional" cuando perciba los delitos anteriormente mencionados.
El comité volverá a reunirse el 28 de junio para terminar de ajustar la ley, con vistas a su aprobación el 1 de julio, cuando se cumplirán 23 años de la devolución del territorio a China por parte de Reino Unido, su antigua potencia colonial, en 1997.
Además, la ley tampoco descarta la extradición a la China continental de cualquier detenido por esta normativa, en lo que supondría la recuperación de los términos de una pasada legislación, ahora suspendida, que precisamente provocó el año pasado la mayor ola de protestas vista en Hong Kong desde que adquirió su estatus actual, ha explicado el delegado hongkonés del Comité Permanente del partido, Tam Yiu Chung.