HONG KONG, 16 Oct. (DPA/EP) -
La jefa del Gobierno de Hong Kong, Carrie Lam, ha tenido que ofrecer su discurso anual a través de un vídeo porque diputados opositores han impedido que lo pronunciara en el Parlamento, como es habitual.
Poco antes de que Lam hablara, un grupo de diputados ha coreado lemas de las recientes manifestaciones como "Liberar Hong Kong, la revolución de nuestros tiempos". También han proyectado algunos sobre las paredes del Consejo legislativo, entre ellos "Cinco demandas, ni una menos".
Las proclamas se han retomado cuando Lam ha comenzado a hablar, por lo que la dirigente hongkonesa finalmente ha tenido que abandonar el Parlamento y ha difundido su discurso en un vídeo.
Lam ha asegurado que el Gobierno está centrado en resolver la actual crisis, que suma su quinto mes, insistiendo en que los hongkoneses deben "dejar de lado sus diferencias" para embarcarse en un diálogo.
Ha reconocido que la ex colonia británica se enfrenta a su "mayor desafío" desde que regresó a soberanía china, en 1997, mencionando el precio de la vivienda y la pobreza, así como la recesión "técnica" en la que ha entrado Hong Kong a raíz de las protestas.
Los diputados opositores, por su parte, han ofrecido una rueda de prensa en la que han reiterado su llamamiento a la dimisión de Lam, a la que consideran "no apta" para el cargo.
El discurso de Lam en un vídeo parece "un mensaje de Al Qaeda o de un gobierno en el exilio que no es capaz de hacer su política en el Parlamento", ha comentado el diputado Au Nok Hin.
Las autoridades hongkonesas habían previsto una reacción de algún tipo, por lo que el Consejo Legislativo ha amanecido fuertemente custodiado por las fuerzas de seguridad, si bien no se esperaba una protesta de los diputados opositores, que son minoría.
Desde junio, cuando comenzaron las protestas, la sede legislativa ha tenido que destinar cinco millones de dólares a reparaciones por los daños causados por los manifestantes, que se han adentrado en el Parlamento en varias ocasiones.
Las movilizaciones populares arrancaron el 9 de junio contra la ley de extradición a la China continental. Desde entonces, Lam ha accedido a cancelar el proyecto de ley y a entablar un diálogo, pero se resiste a abordar otras demandas, incluido el sufragio universal, por lo que las protestas han continuado.