BOGOTÁ, 4 Sep. (Reuters/EP) -
La agente del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), el servicio secreto colombiano, Alba Luz Flórez Gélvez ha revelado a la Fiscalía que ella misma espió a los jueces de la Corte Suprema e hizo seguimientos por orden de sus superiores.
"Evidentemente ella sí estaba cumpliendo ordenes, ella no tiene la posibilidad de cuestionar la orden que su oficial de control le pueda impartir. Cumplía una orden y punto y es algo la estructura natural de un organismo de inteligencia", ha explicado el abogado de Flórez, Edgar Torres, que insistió en que su clienta hizo los seguimientos sin saber en se iba a utilizar la información.
Dijo que "no existía ningún conocimiento por parte de ella del uso que se les estaba dando, o que se le podría dar a esa función concreta del DAS. La colaboración de ella con la justicia arranca cuando a partir del descubrimiento de estas situaciones en los medios de comunicación, y al reconocer ella hacia parte de ello, se apega a la fiscalía y dijo 'yo tengo que ver con esta vaina, ¿en que colaboro?'".
Según el documento difundido por Caracol Radio, en marzo de 2007, el subdirector de fuentes humanas del DAS, William Romero Sánchez informó a Flórez de la necesidad de recolectar información privilegiada de la Corte, una tarea que realizó hasta abril de 2009.
La espía se escondió en cafeterías aledañas al Palacio de Justicia para hacerles el seguimiento a los magistrados y se hizo pasar por una vendedora de productos alimenticios. Además que le pagó, "con dineros del DAS", a una de las empleadas del servicio de la Corte para que "metiera una pequeña grabadora para grabar las salas plenas de los magistrados".
Asimismo, el abogado aclaró que su defendida "entregó copias de inteligencia sobre procesos que adelantaban los magistrados" y que la ex directora del DAS María del Pilar Romero conocía sus acciones. "Por los alcances de la misión fue felicitada por orden de la señora María del Pilar que se sentía orgullosa de mi labor", dijo.
Flórez ha obtenido el beneficio del principio de oportunidad (suspensión del proceso en su contra) y se ha comprometido a testificar contra varios de sus superiores que estuvieron al tanto de esas actividades ilegales. Martha Leal, ex jefe de Operaciones de ese organismo, también negoció beneficios a cambio de ser testigo contra la ex jefe del DAS María del Pilar Hurtado y contra Bernardo Moreno, ex secretario general del Palacio de Nariño, sede de la Presidencia colombiana.