BRUSELAS, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, ha considerado "un buen paso" la liberación este miércoles de dos rehenes por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), el mayor de la Policía colombiana Guillermo Solórzano y el cabo Salín Sanmiguel, pero ha criticado su "contradicción" por perpetrar nuevos secuestros como el de dos empleados de una fábrica de cartones el pasado 10 de febrero en la localidad de El Tambo, en el departamento del Cauca.
"La liberación unilateral de un número de personas secuestradas por las FARC, durante varios años, constituye un buen paso hacia el cumplimiento del Derecho Internacional Humanitario. Sin embargo, el secuestro el 10 de febrero de dos trabajadores en el departamento del Cauca, es una clara contradicción con el espíritu humanitario que, según las FARC, está detrás de estas liberaciones", ha recalcado la portavoz de Ashton, Maja Kocijancic, en un comunicado.
La jefa de la diplomacia europea ha hecho un llamamiento en nombre de la UE tanto a la guerrilla marxista como a los demás grupos armados ilegales en Colombia, como el Ejército de Liberación Nacional (ELN), para que liberen "inmediatamente, a todos los secuestrados que permanecen en cautiverio".
Asimismo, ha querido mandar un mensaje de "apoyo y solidaridad" de la UE con el pueblo y Gobierno colombianos "en su lucha contra el terrorismo" y para lograr "el fin de toda violencia y una paz duradera en el país".
El mayor de la Policía colombiana Guillermo Solórzano y el cabo Salín Sanmiguel, retenidos por las FARC, han sido entregados este miércoles a la misión humanitaria, según ha confirmado el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Los liberados aterrizaron poco después de la confirmación de su liberación en el aeropuerto de Cali, en el departamento de Valle del Cauca (suroeste). Ambos serán trasladados a un centro sanitario donde permanecerán varios días para ser sometidos a las correspondientes revisiones médicas.
El operativo pone fin al proceso de liberación de dos concejales y tres uniformados anunciado por las FARC en diciembre del año pasado. Solórzano, secuestrado en junio de 2007, y Sanmiguel, en mayo de 2008, iban a ser entregados el domingo pero la misión humanitaria no pudo continuar porque, al parecer, hubo un error en las coordenadas que suministró la guerrilla sobre el lugar donde estarían con los oficiales.
La misión humanitaria está encabezada por la ex senadora Piedad Córdoba y cuenta con el apoyo del CICR y de Brasil, que ha aportado los helicópteros utilizados en las entregas.