Actualizado 28/02/2006 18:12

Colombia.- Condenan al Estado a pagar 5,5 millones de dólares por una matanza paramilitar en Antioquia en 1990


BOGOTA, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Estado colombiano ha sido declarado responsable de omisión en una matanza de 43 personas en el municipio de Turbo, departamento de Antioquia, por parte de paramilitares, por lo que ha sido condenado a pagar 5,5 millones de dólares a los familiares de las víctimas, informaron fuentes oficiales.

La responsabilidad del Estado al no prevenir el hecho ocurrido el 14 de enero de 1990 en la zona de Pueblo Bello, en Turbo, fue establecida por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos (OEA).

El subdirector de la Comisión Colombiana de Juristas (CCJ), Carlos Rodríguez Mejía, quien planteó el caso ante la CIDH, presentó los resultados del fallo, acompañado por familiares de las víctimas de esta acción paramilitar.

Entre tanto, el Ministerio colombiano de Asuntos Exteriores indicó en un comunicado que el fallo no supone "la comprobación de que miembros de la fuerza pública hayan participado en la masacre", según informa la emisora local 'RCN'.

Asimismo, explicó que la CIDH señaló en su sentencia al Estado colombiano como responsable, si bien admite que "adoptó varias medidas legislativas para prohibir, prevenir y castigar las actividades de los grupos de autodefensa o paramilitares".

En este sentido, recordó que por los hechos fue condenado Carlos Castaño, quien fuera el máximo jefe de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), que se encuentra desaparecido desde abril del año pasado tras un enfrentamiento en la costa caribeña.

Rodríguez Mejía precisó que la demanda, admitida en 2002, fue presentada en 1997 por la Asociación de Familiares de Detenidos y Desaparecidos de Colombia (FEDEFAM), la Federación Latinoamericana de Asociaciones de Familiares de Detenidos Desaparecidos y la CCJ.

En el fallo la CIDH menciona que el Estado también omitió dar asistencia a los familiares una vez ocurridos los hechos, además de que hasta ahora sólo seis de los 43 cadáveres fueron identificados, rescatados y entregados a sus familiares, y los otros aún están desaparecidos.