BOGOTÁ, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Defensa de Colombia, Juan Carlos Pinzón, ha denunciado que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se han infiltrado en las protestas de apoyo a campesinos y transportistas que se han celebrado este jueves en Bogotá y ha pedido procesar a los "vándalos" por terrorismo.
"Que aquí quede claro que no hay ningunas palomitas, que aquí lo que hay son unos vándalos, criminales, al servicio de intereses oscuros, por supuesto al servicio de los terroristas de las FARC y de sus conexiones políticas", ha dicho en una rueda de prensa.
Pinzón ha asegurado que "esta gente se ha infiltrado en la protesta cometiendo actos de violencia inaceptables y, entre otras cosas, presionando a campesinos y transportistas para que no haya acuerdos (con el Gobierno)".
"Ante ello, la Fuerza Pública tiene el deber de responder con toda contundencia, porque tiene el deber de defender a los ciudadanos y a los bienes públicos", ha subrayado, de acuerdo con un comunicado difundido por el Ministerio de Defensa.
Pinzón ha sostenido que los uniformados "han aguantado numerosas provocaciones", a pesar de lo cual "se han contenido de una manea muy profesional". "Ya se verá en las imágenes cómo evita actuar contra este tipo de violencia", ha augurado.
En este contexto, ha instado a "todos los manifestantes a irse a sus casas" y ha pedido a "padres y madres que hagan entrar en razón a esos muchachos porque están cruzando la barrera de lo aceptable y están entrando en actividad criminal".
"Que nadie olvide en Colombia que tarde o temprano la gente termina enfrentando la justicia, que eso lo sepan desde los jefes del terrorismo hasta aquel que viola una norma o que atenta contra los derechos de los demás ciudadanos", ha advertido.
Además, ha aseverado que "la Fuerza Pública seguirá trabajando para controlar la situación". "Vamos a elevar los dispositivos de presencia militar en ciertas ciudades para darle esa confianza y esa tranquilidad que merecen todos los colombianos", ha detallado.
"También vamos a seguir hablando con los gremios de la producción para ofrecer caravanas militares y policiales donde sea necesario para garantizar que se puedan mover los productos, que haya abastecimiento en los mercados de las ciudades", ha añadido.
Por último, el ministro de Defensa ha reconocido "a aquellos que han participado en las marchas de manera pacífica, de manera responsable". "El talante de la democracia colombiana permite ese tipo de manifestaciones", ha recordado.
DISTURBIOS EN BOGOTÁ
Un adolescente de 16 años de edad ha muerto y al menos 89 personas han resultado heridas, 26 de las cuales han tenido que ser hospitalizadas, incluida una funcionaria municipal en estado grave, por los disturbios de hoy en la capital colombiana.
Miles de personas han recorrido el centro de Bogotá para exigir el Gobierno que apruebe medidas urgentes para mejorar las condiciones laborales de los campesinos y transportistas colombianos y protegerles del impacto de los tratados de libre comercio.
La marcha ha transcurrido en calma hasta que por la tarde grupos de encapuchados han atacado a las fuerzas de seguridad con armas de fuego, cócteles molotov, cristales rotos, piedras y palos, según la prensa colombiana, dando lugar a una batalla campal en el corazón de Bogotá.
Agentes del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) de la Policía Nacional han respondido con el lanzamiento de bengalas, gases lacrimógenos, bombas aturdidoras y balas de goma, de acuerdo con las imágenes de los enfrentamientos.
El incidente más tenso se ha vivido en la Plaza Bolívar, donde los encapuchados fuertemente armados han acorralado a un grupo de policías, que han tenido que ser socorridos por un grupo de manifestantes pacíficos.
"Encapuchados en la Plaza Bolívar sabotean la marcha del paro nacional. Lanzan papas bomba (artefactos explosivos de fabricación artesanal) y pretenden generar caos", ha dicho en Twitter e secretario de Gobierno de Bogotá, Guillermo Alfonso Jaramillo.
Los grupos de encapuchados se han dispersado por toda la capital colombiana a través de la red de Transmilenio, interrumpiendo el transporte público y causando graves daños en el 84 por ciento de las estaciones.
El transporte en superficie también se ha visto afectado porque los encapuchados han levantado barricadas con neumáticos incendiados en algunas zonas y han saboteado la red de carreteras municipal con cristales y piedras. La autopista sur ha tenido que ser cortada.
Además, han saqueado sedes bancarias y comercios, sobre todo supermercados, llevando al desabastecimiento en algunos sectores.
Como consecuencia de todo ello, al menos diez personas han sido detenidas en Bogotá, de acuerdo con el director de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional, el general Yesid Vásquez.
RESPUESTA GUBERNAMENTAL
En respuesta a todo ello, la Alcaldía de Bogotá ha decretado el toque de queda en el área metropolitana y en Soacha, localidad cercana a la capital colombiana que se ha convertido en otro de los puntos calientes de este jueves.
"Habitantes, a partir de las 20.30 horas (3.30 horas en España) y hasta las 5.00 (12.00) se decreta toque de queda. Por favor, transmitir este mensaje", ha anunciado el edil bogotano, Gustavo Petro, a través de la red social.
Las autoridades municipales también han declarado la ley seca y han restringido la circulación para vehículos privados y públicos mediante la imposición del "pico y la placa".