BOGOTÁ, 23 Sep. (COLPRENSA/EP) -
El ministro colombiano del Interior, Germán Vargas Lleras, ha afirmado este jueves que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han "perdido poder territorial" gracias a las diferentes operaciones que ha llevado a cabo el Ejército contra sus campamentos, en los que además han sido abatidos varios de sus líderes.
Vargas Lleras celebró así el éxito del operativo militar y policial en el que murió el comandante militar y el 'ex número dos' de las FARC, Víctor Julio Suárez Rojas, alias 'Jorge Briceño Suarez' o 'Mono Jojoy', uno de los hombres más buscados del mundo.
La 'Operación Sodoma', que fue ordenada el pasado lunes por el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, tuvo lugar en la madrugada de este jueves en la zona selvática de La Magdalena, en el departamento de Meta (sureste), donde se situaba "la madriguera, el corazón" de las FARC.
"Con mayor razón debemos tener la satisfacción de que los operativos son exitosos, las tareas de inteligencia se desarrollan claramente y sin infiltraciones. Sin duda hemos venido teniendo resultados muy exitosos, los cuales han ocasionado que la guerrilla haya perdido poder territorial", dijo el ministro.
Por su parte, el vicepresidente colombiano, Angelino Garzón, afirmó "se recoge un sentimiento de alegría del pueblo colombiano" por lo que ha sido considerado "el golpe más duro" que le ha propinado la Fuerza Pública a la guerrilla.
En este momento, un grupo de médicos forenses está "en el proceso de identificación" de los guerrilleros abatidos. "Dios quiera que haya otros jefes que hayan caído en esta acción limpia y ejemplar, que se hizo respetando todas las normas internacionales", expresó Garzón.
Asimismo, reveló que Santos "ha recibido decenas de llamadas de solidaridad de otros mandatarios y de organismos internacionales", después de que el Ejército confirmara la muerte del 'Mono Jojoy', noticia que ha dado la vuelta al mundo.
"La decisión más revolucionaria que debería tomar la guerrilla es decirle al pueblo colombiano que esta violencia no va más" y, concluyó, que la guerrilla "ya no tiene sentido".