BOGOTÁ, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han culminado este miércoles en La Habana una nueva ronda de negociaciones centrada en la participación de la guerrilla en la políticas del país sin ningún acuerdo.
Esta ronda de las negociaciones se ha visto salpicada por la tensión después de que el viernes pasado el Gobierno colombiano ordenase la vuelta de su delegación por la decisión de la guerrilla de anunciar una pausa por la propuesta del presidente, Juan Manuel Santos, de someter a referéndum los acuerdos a los que lleguen al finalizar el proceso.
Durante el fin de semana, el jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño Echeverri, alias 'Timochenko', se pronunció en contra de la propuesta del Gobierno, advirtiendo de que Santos podría servirse de ello para la reelección, aunque aseguró que se mantendrían en las negociaciones, mientras que el mandatario ordenó la vuelta de la delegación a La Habana.
El jefe del equipo negociador del Ejecutivo, Humberto De la Calle, ha indicado que a partir de ahora también se dialogará sobre cómo poner fin al narcotráfico en Colombia. "Queremos una Colombia sin coca. Sería un paso gigantesco para el país y para el mundo. Y lograr que las FARC colaboren en este propósito, sería un elemento muy importante de estas conversaciones", ha indicado.
El Gobierno ha indicado en un comunicado el "paso importante" dado por la guerrilla al reconocer el daño causado a las víctimas. "Los colombianos se cansaron de la violencia y quieren una paz que signifique hechos reales: que se acaben el secuestro y el narcotráfico, los ataques donde mueren absurdamente tantos jóvenes, las bombas, las minas que mutilan y, por supuesto, que haya resarcimiento para las víctimas", ha comentado.
En la nota, las autoridades colombianas han mantenido su apoyo a la celebración del plebiscito como la mejor forma de ratificar los acuerdos que la guerrilla y el Ejecutivo colombiano podrían alcanzar en la mesa de negociaciones.
Por su parte, las FARC han pedido una reunión con el Grupo de Memoria Histórica para completar el informe sobre las consecuencias del conflicto armado durante 50 años. Este documento asegura que en medio siglo, los enfrentamientos entre las diferentes guerrillas, grupos paramilitares y las autoridades se han producido un total de 200.000 muertos.