BOGOTA, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Defensa de Colombia, Juan Manuel Santos, manifestó este viernes que los oficiales del Ejército implicados en el montaje de al menos un ataque terrorista en Bogotá durante los días previos a la toma de posesión del presidente Alvaro Uribe, buscaban al parecer cobrar las recompensas ofrecidas por el Gobierno a los informantes.
Estos oficiales pudieron haber incurrido en "dolo, en el sentido de querer cobrar unas recompensas, de ganarse una plata", según explicó Santos en declaraciones recogidas por 'RCN Radio'.
El alto cargo reveló que las investigaciones de la Fiscalía General "conducen" a esa hipótesis y descartan que pudiera tratarse de algo para "mejorar en forma falsa el desempeño de nuestras Fuerzas Militares y de Policía" por efecto de presiones del Gobierno o de los altos mandos, agregó Santos, quien no ofreció detalles de la trama.
El ministro colombiano señaló que, en principio, los oficiales estarían implicados en la organización del atentado con coche-bomba que se registró el pasado 31 de julio en una calle del noreste de Bogotá, en el que un indigente murió y 15 soldados fueron heridos.
El atentado fue atribuido a la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y las autoridades advirtieron entonces de que esa guerrilla había puesto en marcha una campaña terrorista con miras a sembrar el pánico en la investidura de Uribe.
El mandatario asumió el pasado 7 de agosto el poder para un segundo mandato, que durará hasta 2010, en una ceremonia a la que asistieron más de 70 delegaciones internacionales, una decena de ellas encabezas por mandatarios de países americanos.
En el caso del coche-bomba en la capital colombiana, el Gobierno ofreció una recompensa de más de 410.000 dólares (casi 324.000 euros)por informaciones que permitieran capturar a los responsables.