BOGOTÁ, 22 Nov. (COLPRENSA/EP) -
Luis Emiro Mosquera, jefe de la compañía Miller Chacón de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), falleció el pasado sábado en el bombardeo que las Fuerzas Militares y de la Policía llevaron a cabo contra el campamento donde se encontraba 'Fabián Ramírez', miembro del Estado Mayor de esa guerrilla.
"Ha habido identificación parcial de los cuatro cuerpos hallados en la zona y quiero destacar el abatimiento de alias 'el negro Mosquera', un ideólogo del Bloque Sur de las FARC", indicó el director de la Policía Nacional, el general Óscar Naranjo.
"Es un gran golpe que se da a lo que nosotros llamamos el 'espíritu de cuerpo' de las FARC, cuando ven que la fuerza pública esta arreciando en operaciones sobre 'Fabián Ramírez', la Fuerza Pública tiene dos hipótesis: que esté enterrado en el campamento o que haya escapado herido". Las operaciones para encontrarlo se extienden por Cartagena del Chairá y San Vicente del Caguán, en el Caquetá (sur).
En el campamento se mantiene el proceso de búsqueda y rastreo donde se produjo la operación en la madrugada del sábado. Entre el material hallado en el campamento se encontraron; un ordenador, las armas del jefe guerrillero, memorias USB, un maletín plateado con 2 millones de pesos (780 euros) y joyas ya se encuentran bajo custodia.
De confirmarse la muerte del alias 'Fabián Ramírez', la Fuerza Pública habría asestado un golpe contra la estructura económica de las FARC, alimentada principalmente del narcotráfico.
"Esta situación se va a ver en los ordenadores incautados: la esencia del narcotráfico en el sur del país", indicó el comandante de la dirección antinarcóticos de la Policía, general César Augusto Pinzón. "Como él maneja un Bloque (Putumayo, Caquetá y parte del Vichada y de Vaupés, estaba manejando una cantidad aproximada de 5 o 10 toneladas de mensuales", agregó.
'Fabián Ramírez' no estuvo nunca en el secretariado de las FARC debido a que se encargaba de los temas del narcotráfico, especialmente en los cultivos y el gramaje. Ramírez logró "tener todo el control de la parte sur del país en lo que es la consecución de alucinógenos. Pasa a ser el productor directo y controlaba la venta obligatoria que los campesinos deben hacer de estos estupefacientes", indicó el comandante de la dirección antinarcóticos de la Policía, general César Augusto Pinzón.