Actualizado 26/06/2013 18:49

Colombia.- MSF advierte de que los civiles afectados por la violencia armada en Colombia cuentan con "escaso apoyo"

MADRID, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -

La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) ha advertido este miércoles de que la población civil afectada por la violencia armada en Colombia sufre "en soledad" las secuencias psicosociales y cuentan con "escaso apoyo" del Estado, el cual no consigue responder "de manera efectiva" a sus necesidades.

Gracias al informe 'Las heridas menos visibles: salud mental, violencia y conflicto armado en el sur de Colombia' publicado este miércoles, la organización ha hecho un llamamiento a las autoridades colombianas para que promuevan cambios en la legislación, de modo que el sistema sanitario del país se haga responsable de estos pacientes.

MSF se ha basado en el testimonio de más de 4.400 pacientes de los programas de salud mental de la ONG en los departamentos de Caquetá, Putumayo, Nariño y Cauca, todos ellos en el sur del país, que fueron atendidos entre enero y diciembre de 2012.

La organización ha extraído varias conclusiones, entre ellas, que un 67 por ciento de los pacientes tuvieron una "tendencia considerablemente más alta" a sufrir síntomas de depresión y ansiedad o cuadros post-traumáticos que los pacientes que se acercaron a la consulta por causas ajenas a la violencia.

"A pesar del profundo impacto que la violencia tiene en la población colombiana, la salud mental sigue siendo un campo poco explorado, y la respuesta de los servicios sanitarios frente a trastornos mentales es generalmente limitada o inadecuada", ha declarado el coordinador general de MSF en Colombia, Javier Martínez.

"Es necesario que los servicios de atención psicoterapéutica estén asegurados en el primer nivel de atención, que acompañen a los equipos que se desplazan a las zonas rurales" así como "que el Estado garantice los protocolos y recursos adecuados para que los afectados puedan superar los hechos traumáticos que han vivido", ha proseguido.

CONFLICTO INTERNO

De acuerdo con el comunicado divulgado este miércoles por MSF, los sucesos que afectan en mayor medida a la salud mental de los pacientes se encuentran "directamente" vinculados al conflicto interno, entre el Gobierno y principalmente las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que actualmente están en proceso de diálogo.

Un gran porcentaje de las personas entrevistadas aseguraron haber sido "testigos de primera mano" de violencia física, amenazas o asesinatos, muchos dijeron que habían sido víctimas de "desplazamientos forzosos y de amenazas" y que habían sufrido el asesinato o desaparición de alguno de sus familiares, reza el comunicado.

"Nunca me había sentido así. Nunca había visto a mi esposo tan callado, nunca lo había visto llorar en silencio", ha indicado una mujer de 50 años natural de Cauca. "¿Y qué decir de mi hijo? El muchacho ya no es el de antes. Ahora en su mirada ya no hay ternura, hay rabia, hay odio. No sé qué va a ser de nosotros ahora, sólo sé que nos queda Dios y que nuestra vida no será la misma porque ahora somos desplazados", ha proseguido en relación con el estado de salud mental de su marido y su hijo.

La salud mental debe ser "un derecho universal accesible" para toda la población afectada por el conflicto y por otras situaciones de violencia y debe ofrecerse en las estructuras de salud "sin condiciones administrativas que restrinjan el acceso a la misma", ha exigido MSF.

"Desde MSF hacemos un llamamiento al Estado colombiano para que continúe profundizando en la legislación e implementación de la atención psicosocial y comprometiéndose a eliminar cualquier barrera a los servicios de salud mental para todos aquellos que día a día siguen sufriendo las consecuencias de la lucha armada y de la violencia en Colombia", ha concluido Martínez.