Publicado 25/09/2019 17:37

Colombia.- MSF denuncia "barreras" en Colombia para el aborto diez años después de su legalización

MADRID, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -

Casi una de cada nueve de las mujeres que recurrieron en Colombia a Médicos Sin Fronteras (MSF) para interrumpir su embarazo se enfrentaron antes a alguna "barrera" que les complicó el proceso, según la ONG, que ha recordado los desafíos pendientes diez años después de la legalización del aborto en el país sudamericano.

MSF cuenta con proyectos en el distrito de Buenaventura y en los departamentos de Nariño, Arauca y Norte de Santander para atender a las mujeres que quieran interrumpir de forma voluntaria la gestación. A partir del análisis de 428 casos en 2017 y 2018, ha elaborado el informe 'Aborto no seguro, mujeres en riesgo'.

El 88 por ciento de las pacientes se enfrentó antes a algún tipo de barrera, de las cuales un 47 por ciento desconocía que podía acceder a este tipo de servicios. A un 27 por ciento de las mujeres se les había negado previamente el aborto en otras estructuras de salud, mientras que un 5 por ciento había sufrido rechazo social o de su entorno.

MSF ha advertido también de la vulnerabilidad que sufren las mujeres con bajo nivel educativo o que residen en zonas rurales, toda vez que el aislamiento implica no solo largos desplazamientos, sino también unos gastos que pueden ser difíciles de asumir en ciertos hogares.

De las 143 mujeres derivadas a otras instituciones, 103 --el 70 por ciento-- se vieron obligadas a trasladarse a ciudades como Cali, Medellín, Pasto o Villavicencio para acceder al aborto.

UNA EMERGENCIA MÉDICA

MSF ha advertido de que "el aborto no seguro es una emergencia médica", ya que considera que, cuando una mujer está decidida a terminar su embarazo, lo hace sin importarle la seguridad o la legalidad del procedimiento. Las formas más comunes pasan por "consultar a alguien no cualificado o intentarlo por sí misma", ha aseverado la ONG en un comunicado.

La organización ha instado a las autoridades a fomentar los protocolos de educación sexual y planificación familiar, generalizar el acceso al aborto para todas las mujeres que lo requieran y reforzar los derechos de mujeres y niñas para decidir libremente su futuro.