Actualizado 20/02/2013 06:41

La Armada colombiana evita una "situación grave" con la nicaragüense en aguas de San Andrés


BOGOTÁ, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Armada colombiana ha revelado que este martes ha evitado una "situación grave" con las embarcaciones nicaragüenses que se encuentran en las aguas del archipiélago de San Andrés, Santa Catalina y Providencia, cuya soberanía reivindican Bogotá y Managua.

El comandante de la Armada, el almirante Roberto García Márquez, ha explicado que el Buque Almirante Padilla ha evitado que una embarcación nicaragüense inspeccionara ilegalmente un pesquero con bandera colombiana.

"Nuestro comandante le ha dicho al comandante del patrullero: 'Capitán, usted cumpla su misión, que es cuidar a los pesqueros nicaragüenses, y no se arriesgue, no se exponga, ni fuerce una situación grave'", ha relatado.

García Márquez ha indicado que tras la advertencia colombiana la embarcación nicaragüense ha renunciado a su pretensión de inspeccionar el pesquero pero que, pese a ello, la Armada ha reforzado su presencia en la zona de Luna Verde.

A colación de este incidente, ha aprovechado para denunciar que las patrulleras nicaragüenses "atemorizan" mediante avisos por radio a los pescadores colombianos que se encuentran en las aguas del archipiélago, según ha informado Caracol Radio.

En la misma línea, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, denunció ayer que --de acuerdo con los pescadores-- las autoridades nicaragüenses presentes en la zona fronteriza, "les amenazan y les dicen que tienen que pedir permiso para faenar" en las aguas de San Andrés.

"Nadie tiene que pedir permiso a nadie para pescar donde tradicionalmente lo han venido haciendo. Esos incidentes no se tienen que presentar", sostuvo, en declaraciones recogidas por prensa presidencial en un comunicado.

En consecuencia, el jefe de Estado informó de que ha dado "instrucciones perentorias y precisas (a la Armada) para que los derechos históricos (de nuestros pescadores en el archipiélago) se hagan respetar, pase lo que pase".

DISPUTA TERRITORIAL

La Corte Internacional de Justicia (CIJ) reconoció el pasado 19 de noviembre la soberanía colombiana sobre el archipiélago, que reclamaban tanto Bogotá como Managua, y amplió la extensión de las aguas territoriales de Nicaragua hasta las 200 millas náuticas en todos los puntos de la línea limítrofe.

Santos ha considerado que la decisión del alto tribunal sobre las aguas nicaragüenses es un "error" porque aísla tres cayos del territorio continental colombiano y "desconoce varios acuerdos internacionales", lo que genera "una serie de complejidades" que afectarán a varios países caribeños.

En consecuencia, ha anunciado que Colombia abandonará el Pacto de Bogotá --por el que reconoce la jurisdicción de la CIJ-- y que su Gobierno recurrirá la resolución judicial, para lo cual ha contratado a un prestigioso despacho británico que, al parecer, está ultimando el escrito.

En cambio, el presidente nicaragüense, Daniel Ortega, ha calificado la decisión del alto tribunal de "victoria nacional" y, aunque ha expresado su preocupación por las palabras de su homólogo colombiano, ha confiado en que finalmente reconozca el fallo de la CIJ, ya que "no hay otra forma de seguir adelante".

Si no es así, la presidenta de la Corte Suprema de Justicia de Nicaragua, Alba Luz Ramos Vanegas, ya ha advertido de que el país centroamericano podría acudir al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para obligar a Colombia a cumplir la decisión judicial.