MADRID, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia de la Organización de los Estados Americanos (MAPP/OEA) ha llamado este miércoles a "persistir" en el "diálogo" para resolver los conflictos en el país sudamericano.
El equipo ha presentado al Consejo Permanente su trigésimo informe semestral, correspondiente al segundo semestre de 2020, en el que se ha constatado los efectos de la COVID-19 en las dinámicas del conflicto y la paz en el país, particularmente en los territorios donde convergen factores estructurales de violencia, inequidad, débil presencia estatal y baja conectividad.
Así, la misión ha evidenciado que en el período mencionado la violencia ejercida por grupos armados ilegales "continuó impactando gravemente la vida, la integridad y los derechos de sectores sociales específicos".
"Liderazgos sociales, comunales y de Derechos Humanos; comunidades y autoridades étnico-territoriales; niños, niñas, adolescentes, mujeres y jóvenes; población migrante, y personas en proceso de reincorporación fueron los más afectados", ha aseverado en un comunicado.
Asimismo, ha advertido de que las amenazas y los homicidios contra los liderazgos y sus familias "desincentivaron la participación y limitaron el impulso de diálogos amplios e incluyentes".
En este sentido, ha apuntado a que "graves violencias" en su contra por parte de grupos armados ilegales se registraron principalmente en los departamentos de Antioquia, Cauca, Nariño, Norte de Santander y Putumayo, mientras que en Meta, Caquetá y Guaviare estas afectaciones "menguaron espacios de participación, a pesar de la exacerbación de conflictividades socio ambientales".
La MAPP/OEA ha incidido también en que identificó que a finales del año pasado, en medio del aislamiento obligatorio, la expresión ciudadana nacional continuó "organizada alrededor de exigencias por el respeto, la protección y la garantía del derecho fundamental a la vida".
El equipo de la OEA ha valorado también la "instalación, reactivación y dinamización de los Consejos Territoriales de Paz, Reconciliación y Convivencia como espacios claves para abordar los desafíos de la construcción de paz".
En concreto, ha aplaudido que en Caquetá se reactivaron 13 Consejos, en Chocó se instalaron cinco nuevos, y en el Catatumbo se retomaron las sesiones de manera presencial o semipresencial.
"Como imperativo humanitario y democrático, llamamos a seguir fortaleciendo los esfuerzos estatales para mitigar los factores de riesgo vigentes para comunidades e individuos. También, a mantener abiertos los canales para la resolución pacífica de los conflictos, la búsqueda conjunta de soluciones y la construcción de una paz verdaderamente completa. Condenamos toda violencia, e insistimos que el camino es el diálogo amplio, constructivo y eficaz", ha apostillado, al respecto, el jefe de la misión, Roberto Menéndez.
Por último, la misión, que cumple este ejercicio 17 años de monitoreo y acompañamiento territorial permanente a la implementación de políticas de paz, ha reiterado su compromiso de "seguir acompañando a los colombianos en la construcción de nuevas esperanzas y de la anhelada paz completa".