BOGOTÁ, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno ha rechazado la solicitud de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para que el ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo, se una a la mesa de negociaciones, ya que en estos momentos se está tratando el desarrollo agrario, el primer punto de la agenda del diálogo de paz.
El propio Restrepo ha emitido un comunicado en el que ha subrayado que "el Gobierno tiene una política clara", por lo que "no concurrirá o dejará de concurrir (a la mesa de negociaciones) por emplazamientos" de las FARC.
"Hay un procedimiento, hay unos negociadores, hay unos portavoces y ellos son los que manejan los detalles, las reacciones y los matices de la negociación", ha recordado el titular de Agricultura, según informa Caracol Radio.
Así, ha explicado que su participación "está sujeta a un marco de discreción", por lo que "si el Gobierno considera necesario pronunciarse sobre la solicitud de las FARC, lo hará a través de (su jefe negociador), Humberto de la Calle".
"Nada más improcedente que un ministro empiece a reaccionar desde Bogotá a cada declaración de las FARC", ha considerado. "El Gobierno, a través del Grupo Negociador, es quien tiene la palabra. Los ministros seguimos en nuestro trabajo y los negociadores en el suyo", ha insistido.
Por otro lado, aunque ha rehusado hablar sobre los temas específicos de la mesa de negociaciones, ha sostenido que "el Gobierno tiene una política agraria avanzada y audaz que quiere impulsar --haya o no negociaciones con las FARC--, respetando el derecho privado".
Sobre el diálogo de paz, Restrepo ha aplaudido "el tono menos retórico, más concreto y más pragmático de las FARC". "Ojalá ayude a que se pueda avanzar a algo tangible en materia de negociación de paz como tanto necesita y anhela Colombia", ha dicho.
En la misma línea, el vicepresidente colombiano, Angelino Garzón, ha indicado que la presencia de Restrepo en la mesa de negociaciones "no es necesaria" porque "ya hay delegados del Gobierno" en la misma.
Además, el 'número dos', ha instado a la guerrilla a llevar a cabo más acciones hacia la consecución de la paz y dejar a un lado la retórica. "Lo mejor que pueden hacer las FARC es decir que van a respetar la población civil", ha estimado.
Desde el pasado 8 de octubre en Oslo y el 19 de noviembre en La Habana, el Ejecutivo y la guerrilla abordan una agenda temática de cinco puntos para poner fin a más de medio siglo de conflicto armado.