BOGOTÁ, 22 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha dejado en los ríos varios mensajes con los que invita a los guerrilleros a sumarse esta Navidad a los programas de desmovilización para que puedan reincorporarse a la vida civil, lejos de la violencia y con la garantía de que no serán blanco de represalias.
"No deje pasar esta Navidad. Desmovilícese", dice el mensaje que contienen unas mil esferas transparentes que fueron enviadas a los guerrilleros a través de los principales afluentes de los ríos La Macarena y Catatumbo, en el sur de Colombia.
Las bolas están dotadas de una luz con una batería especial para que estén encendidas durante seis días, tiempo suficiente para que el mensaje llegue a lo más profundo de la selva, donde se refugian miles de rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
"Ojalá en esta Navidad, en vez de tener un desmovilizado cada seis horas, tengamos muchos más. La lucha armada y la violencia no pagan", expresó Santos, al dar inicio a la segunda fase de la operación 'Ríos de luz' durante un acto en una base militar del departamento de Caquetá (sur).
El programa 'Ríos de luz' comenzó hace cinco años con el objetivo de poner fin al conflicto armado mediante la desmovilización de los integrantes de los grupos subversivos que operan en Colombia desde hace cinco décadas.
Santos aseguró que las condiciones están dadas para que los guerrilleros "puedan regresar a la vida civil, a la democracia y, realmente, a la libertad", al tiempo que se comprometió a cumplir con las garantías para que no hayan represalias una vez que inicien el proceso de reinserción.
"Soy garante de que les vamos a cumplir, como les hemos cumplido a cerca de 50.000 colombianos que han dejado sus armas, que se han desmovilizado y hoy están viviendo una vida digna, una vida alegre, una vida alrededor de sus familias", aseveró.
Desde enero de 2003 hasta la fecha, unos 35.306 paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y cerca de 19.000 rebeldes de las FARC han entregado sus armas, según cifras divulgadas esta semana por la Agencia Colombiana para la Reintegración (ACR).
Del grupo paramilitares desmovilizados, 26.447 pueden acceder a los beneficios de la ley 1424, que otorga beneficios jurídicos a los miembros de los grupos armados ilegales que se entreguen a fin de que puedan conservar su libertad, siempre que cumplan con los compromisos del proceso de reintegración.
Sin embargo, la ACR desconoce el paradero de unos 3.000 exrebeldes de la AUC que no se habían acogido a la ley 1424. El número era aún mayor pero en las últimas semanas 2.173 paramilitares anunciaron su intención de sumarse al proceso de reintegración, de un grupo de 9.491 desmovilizados que habían quedado por fuera y que pueden beneficiarse de la medida.
La ley 1424, cuyo plazo vence el próximo 28 de diciembre, saca del limbo jurídico a todos aquellos desmovilizados de las AUC que no pudieron beneficiarse de otras medidas, siempre que no hayan delinquido nuevamente y que estén dispuestos a cumplir con todas las exigencias del proceso de reintegración.