BOGOTÁ, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, alcanzó en los dos últimos meses un respaldo ciudadano a su gestión del 72 por ciento y mantiene un 65 por ciento de imagen favorable a pesar del escándalo de la 'parapolítica', es decir, los presuntos vínculos de políticos con grupos paramilitares, según la última encuesta de la firma Invamer-Gallup.
La aparición del acuerdo secreto entre varios congresistas y paramilitares en Santa Fe del Ralito en julio de 2001, las detenciones de parlamentarios, la renuncia de la ministra de Exteriores María Consuelo Araujo por el arresto de su hermano, el senador Álvaro Araujo, la captura del ex director del servicio secreto Jorge Noguera y el duro enfrentamiento de Uribe con la oposición no han afectado a su imagen favorable.
Jorge Londoño, gerente de Invamer-Gallup, explicó que los resultados de la encuesta dan a entender que la opinión pública considera que el escándalo de la 'parapolítica' es una consecuencia de la Seguridad Democrática, es decir, que todo esto ha ocurrido porque el mandatario ha encarcelado a los 'paras' y éstos están confesando sus crímenes.
"A pesar de lo enrarecido del clima político, la gente percibe que todo esto se ha dado gracias a la gestión del presidente y quienes dicen lo contrario, a los ojos de la opinión pública, están equivocados", asegura Londoño al referirse a los resultados del sondeo, según informa el diario local 'El Tiempo'.
Sin embargo, el dirigente del partido opositor Polo Democrático, Gustavo Petro, no ha ganado en imagen favorable pese al escándalo de la 'parapolítica'. En diciembre, la opinión favorable que los colombianos tenían del senador era del 26 por ciento, y ahora ha pasado al 24 por ciento, mientras que la desfavorable aumentó del 22 al 29 por ciento.
Llama la atención igualmente que mientras la imagen favorable del presidente Uribe y el respaldo a su gestión se mantienen muy elevados, la percepción sobre la situación del país es que está empeorando, según se desprende del sondeo de Invamer-Gallup.