Publicado 27/10/2020 17:51

Condenado a cinco años de cárcel en Turquía un empleado del consulado de EEUU en Estambul por supuestos lazos con Gulen

Turquía.- Condenado a cinco años de cárcel un trabajador del consulado de EEUU e
Turquía.- Condenado a cinco años de cárcel un trabajador del consulado de EEUU e - Mustafa Kamaci/Turkish Presidenc / DPA - Archivo

MADRID, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -

Un tribunal de Turquía ha condenado este martes a más de cinco años de cárcel a un trabajador del consulado de Estados Unidos en la ciudad de Estambul por sus presuntos lazos con el clérigo islamista Fetulá Gulen, al que las autoridades acusan de estar detrás del intento de golpe de Estado de julio de 2016.

El tribunal ha sentenciado a cinco años y dos meses de cárcel a Nazmi Mete Canturk por pertenencia a la nebulosa de adeptos a Gulen, quien vive en Estados Unidos, debido a sus presuntos lazos con funcionarios y policías acusados de tener relación con el clérigo, según ha informado el diario turco 'Daily Sabah'.

Asimismo, ha declarado probado que Canturk realizó transferencias de dinero a asociaciones y fundaciones vinculadas a Gulen, tal y como denunció la Fiscalía, que ha pedido la liberación de la esposa y la hija de Canturk argumentando que no hay pruebas suficientes que sustenten las sospechas.

La sentencia contra Canturk, que era parte del equipo de seguridad del consulado, llega cuatro meses después de la dictada contra Metin Topuz, otro empleado de la legación diplomática, quien recibió una pena de ocho años y nueve meses de cárcel por sus presuntos lazos con Gulen.

Estados Unidos y Turquía han protagonizado varios encontronazos en los últimos años, en parte por la detención de varios estadounidenses en el país y la negativa de Washington de detener y extraditar a Gulen, que vive en Pensilvania.

El Gobierno turco culpa a Gulen de estar detrás del fallido golpe de Estado de 2016 --que se saldó con más de 250 muertos--, si bien el clérigo, que vive en el país norteamericano en un exilio autoimpuesto desde 1999, ha negado estar vinculado con la intentona.

El presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, y Gulen eran aliados políticos hasta que la Policía y la Fiscalía, supuestos simpatizantes del clérigo, según el Gobierno turco, abrieron una investigación sobre corrupción en 2013 contra varios altos cargos del Ejecutivo.