MADRID, 10 Ago. (EUROPA PRESS) -
Corea del Sur se prepara para recibir a partir de este lunes la llegada del tifón Jangmi, el quinto de la temporada, después de que las recientes lluvias torrenciales hayan dejado en las últimas horas un balance de al menos 30 víctimas mortales y más de 6.000 personas desplazadas.
Al menos 30 personas han muerto en Corea del Sur desde el pasado 1 de agosto a causa de las inundaciones y desplazamientos de tierra provocados por las fuertes lluvias que azotan el país, aunque la cifra podría aumentar a la espera de que se halle el paradero de más de una decena de personas.
Más de 5.900 personas de once provincias y ciudades han abandonado sus hogares, 4.600 de las cuales se encuentran en refugios temporales, según ha hecho saber el Centro Nacional para la Gestión de Desastres, citado por la agencia oficial de noticias surcoreana Yonhap.
Las lluvias han causado daños a más de 9.400 instalaciones públicas y privadas, según las estimaciones oficiales, mientras los meteorólogos han avisado de que las precipitaciones continuarán en las regiones centrales del país a partir del lunes con la llegada de un nuevo tifón que azotará el sur de la península coreana.
La agencia meteorológica estatal ha señalado que la tormenta tropical probablemente caiga sobre la ciudad portuaria de Busan, a unos 325 kilómetros al sureste de Seúl, alrededor de las 15:00 del lunes (hora local), y ha pedido a la población que extreme las medidas de precaución ante las más que previsibles nuevas inundaciones.