Publicado 26/10/2021 10:35

Corea del Sur.- Muere el expresidente surcoreano Roh Tae Woo, aliado golpista y pionero tras el fin de la dictadura

Archivo - FILED - 25 February 1988, South Korea, Seoul: President Roh Tae-woo is sworn in as South Korea's new president at his inauguration ceremony in Seoul. Roh, who served as president from 1988-1993, died at the age of 88. Photo: -/YNA/dpa
Archivo - FILED - 25 February 1988, South Korea, Seoul: President Roh Tae-woo is sworn in as South Korea's new president at his inauguration ceremony in Seoul. Roh, who served as president from 1988-1993, died at the age of 88. Photo: -/YNA/dpa - -/YNA/dpa - Archivo

MADRID, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -

El expresidente surcoreano Roh Tae Woo, que pasó de colaborar en el golpe de 1979 a ser primer jefe de Estado del país asiático tras el fin de la dictadura militar, ha fallecido este martes a los 88 años, según ha informado su equipo, después de que el antiguo mandatario fuese hospitalizado recientemente por un deterioro en su estado de salud.

Roh, antiguo general de las Fuerzas Armadas, contribuyó en el golpe militar perpetrado en 1979, con el que Chun Doo Hwan ascendió el poder tras el vacío creado por el fallecimiento del entonces presidente, Park Chung Hee. Sin embargo, casi una década después, en 1988, se convirtió en el primer mandatario en ser elegido por voto directo, inicio de lo que a la postre sería la democratización definitiva de Corea del Sur.

Permaneció en el cargo hasta 1993 y, durante el tiempo en que estuvo en el poder, abogó por gobernar para el ciudadano de a pie, una premisa que recuerda este miércoles la agencia oficial de noticias Yonhap. A Roh se le atribuyen también nuevas alianzas con potencias regionales y, con él como presidente, las dos Coreas entraron en la ONU.

Sin embargo, la sombra del golpe de 1979 lo persiguió hasta ya entrada la década de los noventa. En 1996, tanto él como Chun, con quien había compartido clase en la academia militar fueron condenados por su implicación tanto en la asonada como en la represión de las movilizaciones de 1980 en favor de la democracia.

La Justicia surcoreana condenó a Roh a 17 años de cárcel, aunque solo un año después del fin del juicio, en 1997, recibió un primer indulto de mano del Gobierno de Kim Young Sam. En 2013, el Estado le perdonó todas las multas, que ascendieron en la sentencia inicial a 260 millones de wones (unos 192 millones de euros al cambio actual).