Publicado 04/04/2020 05:53

Coronavirus.- ACNUR avisa de que el coronavirus lleva "nuevas amenazas" a Libia un año después de la ofensiva en Trípoli

Coronavirus.- ACNUR avisa de que el coronavirus lleva "nuevas amenazas" a Libia
Coronavirus.- ACNUR avisa de que el coronavirus lleva "nuevas amenazas" a Libia - Amru Salahuddien/dpa

MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -

ACNUR ha avisado este viernes de que la pandemia del coronavirus lleva "nuevas amenazas" a Libia y empeorará los combates un año después de que el mariscal de campo Jalifa Haftar, leal a las autoridades del este del país, lanzara una ofensiva militar en Trípoli.

"Un año después del lanzamiento de la ofensiva militar en Trípoli, los combates empeoran aún más con el Covid-19, que trae al país nuevas amenazas", ha advertido el portavoz de ACNUR, Babar Baloch.

La agencia de la ONU ha recordado que más de 300 civiles han sido asesinados y 150.000 se han visto obligados a desplazarse de sus hogares desde el comienzo de la ofensiva, que cumple un año este sábado.

"A pesar de una tentativa de acuerdo para una tregua humanitaria, los combates han escalado significativamente durante la semana pasada", ha lamentado ACNUR, que también ha remarcado que la seguridad "deteriorada" en Libia también mina la capacidad de miles de civiles desplazados para volver a sus zonas de origen de forma segura. De hecho, la inseguridad ha favorecido la criminalidad, con un aumento del número de robos.

De forma paralela, las autoridades libias ya han confirmado diez casos de coronavirus y una muerte, lo que acrecienta las preocupaciones respecto a la capacidad de los "debilitados servicios de salud" de Libia para responder a la pandemia.

El conflicto en Libia ha impactado "severamente" en los servicios médicos que se proporcionan en el país y en su sistema de salud, que tiene unos recursos económicos limitados y se enfrenta a la carencia de equipamiento básico y medicinas. Además, según ACNUR, muchos hospitales e instalaciones sanitarias, situadas en áreas cercanas a donde suceden los combates, han sido clausuradas o están dañadas.

"La vida diaria se ha dificultado mucho para todas las personas en Libia", ha agregado Baloch, que también ha remarcado la situación que viven los refugiados. Tanto los civiles como los refugiados y los solicitantes de asilo se enfrentan a problemas al acceder a bienes básicos, servicios o encontrar trabajo.

"El alquiler, la alimentación o el precio de los combustibles han subido y la gente se está enfrentando a dificultades serias para acceder a sus necesidades básicas", ha insistido Baloch.

EL PROBLEMA DE LA VIVIENDA

En este sentido, ACNUR ha expresado su preocupación "particular" por la creciente falta de viviendas asequibles y de los precios del alquiler, ya que muchos desplazados libios, algunos más de una vez, han sido forzados a abandonar sus hogares y buscan nuevas casas que alquilar.

Esta particularidad afecta especialmente a los refugiados y a los solicitantes de asilo, que son incapaces de encontrar trabajos duraderos. De hecho, los propios refugiados han relatado a ACNUR que "los precios para alquilar una sola habitación se han multiplicado por seis, mientras que el coste de alquilar una casa se ha triplicado.

Así, "muchas personas viven en edificios abarrotados, sin terminar de construir y sin amueblar, o en garajes, con hasta diez personas compartiendo una habitación individual", ha criticado el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los refugiados.

Por su parte, ACNUR ha enviado generadores, ambulancias, contenedores y carpas para montar clínicas, en un intento de apoyar a los servicios de salud libios. Asimismo, han iniciado una campaña de concienciación sobre la salud pública entre refugiados, solicitantes de asilo y civiles a través de carteles, mensajes de texto y redes sociales, cuyo objetivo es mitigar los riesgos de exposición al Covid-19.

Además, han pedido a las autoridades libias que aseguren el acceso y la inclusión de todos los grupos de población de Libia a servicios de salud y planes y actividades de respuesta. Por último, se ha hecho eco del llamamiento del secretario general de la ONU, António Guterres, para un alto el fuego en todas las regiones del globo en las que se están desarrollando conflictos con el objetivo de combatir la pandemia del coronavirus.

Los combates en Libia han continuado en los últimos días a pesar de que ambas partes se mostraron a mediados de marzo favorables a un alto el fuego humanitario para intentar contener la pandemia de coronavirus.

El conflicto se recrudeció en abril de 2019, cuando las fuerzas lideradas por Haftar lanzaron una ofensiva para hacerse con Trípoli, sede del gobierno de unidad, reconocido internacionalmente.

Además, Haftar anunció a mediados de diciembre el inicio de la "batalla final" y la "hora cero" por Trípoli y ordenó a sus fuerzas avanzar hacia la ciudad. En este contexto, sus fuerzas tomaron por sorpresa a principios de enero la ciudad de Sirte, en un duro golpe al gobierno de unidad.