MADRID, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Conferencia de Seguridad de Múnich (MSC) ha decidido aplazar su edición de 2021 sin fijar una nueva fecha ante el riesgo derivado de la pandemia del nuevo coronavirus originado en la ciudad china de Wuhan, tras haberse celebrado esta cita internacional en el mes de febrero durante más de medio siglo.
"La Conferencia de Seguridad de Múnich se ha celebrado cada mes de febrero durante más de cinco décadas. El próximo año, la pandemia actual nos impedirá celebrar la MSC como estaba planeada originalmente del 19 al 21 de febrero", ha explicado en un comunicado el presidente de la Conferencia de Seguridad de Múnich, Wolfgang Ischinger.
Ischinger ha explicado que hay "clara y urgente" necesidad de celebrar "tan pronto como sea posible" la Conferencia de Seguridad de Múnich toda vez que este foro representa "una plataforma para el diálogo informal entre líderes internacionales".
"No hemos tomado esa decisión de aplazamiento a la ligera. Continuaremos trabajando con nuestros socios para identificar una nueva fecha para la Conferencia de Seguridad de Múnich de 2021, que será anunciada tan pronto como pueda ser confirmada por las autoridades relevantes", ha indicado.
"Como presidente de la Conferencia de Seguridad de Múnich, mi objetivo sigue siendo convocar la Conferencia de Seguridad de Múnich de 2021 lo más cerca posible de su formato físico y tan pronto como las condiciones lo permitan", ha concluido.
La decisión de aplazar la Conferencia de Seguridad de Múnich, que cada año reúne a algunos de los más importantes líderes internacionales en materia de seguridad y defensa, se ha dado a conocer el mismo día en que Alemania ha marcado un nuevo récord diario de muertos por coronavirus, con 590 decesos, además de registrar más de 20.000 casos nuevos.
El país europeo está sufriendo un mayor impacto por la segunda ola de la pandemia que el que experimentó con la primera y acumula un total de 1,22 millones de contagios y más de 20.000 fallecidos. A nivel global, la pandemia del nuevo coronavirus deja más de 68 millones de personas contagiadas y más de 1,5 millones de víctimas mortales.