MADRID, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de Australia, Scott Morrison, ha anunciado que el Gobierno "no ha fijado, ni tiene previsto fijar, nuevo objetivos para completar las primeras dosis" de la vacuna contra el coronavirus "dadas las numerosas incertidumbres que existen".
En un comunicado publicado en su página de Facebook, el presidente australiano ha incidido en que les gustaría "que estas dosis se completaran antes de finales de año", pero "no es posible establecer tales objetivos".
"Nos limitaremos a seguir trabajando juntos para producir, distribuir y administrar las vacunas de la forma más segura y eficiente posible", ha subrayado, para añadir que mantendrán informados a los ciudadanos del plan de vacunación con informes diarios.
Estas declaraciones se dan después de la promesa de la Administración de a vacunar a toda su población adulta antes de octubre, pero el inicio de la campaña de vacunación ha sido lento debido, entre otros, al retraso en las entregas de inmunizadores.
En el escrito, el líder ha avisado de que se les compara con otros países, y ha destacado que "los últimos datos muestran que el programa de vacunación de Australia está avanzando en consonancia con países comparables como Alemania, y por delante de Canadá, Suecia, Francia, Nueva Zelanda, Corea del Sur y Japón en la misma fase de sus despliegues".
Según las cifras ofrecidas por el líder, ya se han administrado 1,16 millones de dosis, de las cuales más de 465.000 han sido administradas por médicos de cabecera.
Se espera, además, que otros 1.000 médicos de cabecera se unan al despliegue esta semana, con lo que el número total superará los 4.000, ha detallado Morrison.
Por otra parte, es "importante" señalar que se han inyectado más de 142.000 dosis a residentes de centros de atención a la tercera edad, en más de 1.000 instalaciones, y que más de 46.000 de ellas son las segundas.