VIENA, 16 Abr. (DPA/EP) -
Las 130.000 personas que viven y trabajan en las residencias de ancianos en Austria serán sometidas a la prueba del nuevo coronavirus con el fin de contener la propagación de la pandemia a estos potenciales focos de contagio, según ha anunciado este jueves el ministro de Sanidad, Rudolf Anschober.
"Esta es un área en la que los riesgos son mayores", ha subrayado en rueda de prensa el ministro, para justificar el que se realicen las pruebas en las 918 residencias de ancianos del país.
Los fiscales han confirmado este jueves que una residencia en la provinciade Syria está siendo investigada por homicidio negligente, después de que el diario 'Kronen Zeitung' desvelara que 39 miembros del personal y residentes del centro, con 160 camas, habían contraído el virus y seis personas habían muerto.
Además, las autoridades sanitarias de Austria prevén extender la realización de las pruebas a los trabajadores del comercio minorista después de que el pequeño comercio reabriera sus puertas esta semana en el marco del plan gradual del Gobierno de aliviar el confinamiento.
Austria ha registrado hasta ahora más de 14.400 casos, con más de 8.000 pacientes recuperados y 356 fallecidos. En la última semana, la cifra de nuevos contagios diarios ha caído en torno al centenar.