MADRID, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -
La agencia epidemiológica estadounidense ha pedido a la población norteamericana que prosigan con las medidas de protección a pesar de que el promedio semanal de casos de coronavirus en el país ha caído a su nivel más bajo en casi cuatro meses, dado que la variante identificada en Reino Unido, más contagiosa, se está propagando por el país.
La director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), Rochelle Walensky, ha recordado que se han identificado hasta ahora más de 1.000 casos de la "cepa británica" en 39 estados del país y los primeros datos "han sugerido que, de hecho, podría incidir en un aumento de la morbilidad y la mortalidad", en declaraciones a la NBC.
A pesar de que se han administrado hasta el momento más de 50 millones de vacunas, el país continúa registrando cerca de 100.000 casos por día, si bien las infecciones, hospitalizaciones y muertes han disminuido de manera constante desde los picos de enero.
Los nuevos casos confirmados de COVID-19 Se redujeron a unos 84.000 el sábado, en comparación con un promedio de 97.240 para los siete días que terminaron el viernes, el promedio semanal más bajo del país desde fines de octubre, según datos compilados por la Universidad Johns Hopkins y Bloomberg.
Si bien las pruebas han disminuido ligeramente en todo el país, la tasa de pruebas positivas ha disminuido de más del 13 por ciento a principios de este año a menos del 6 por ciento, según los datos de la universidad.
Sin embargo, Estados Unidos agregó 3.433 muertes el sábado, en comparación con un promedio de 3.058 durante los siete días anteriores, si bien cabe la posibilidad de que la última cifra de muertos haya sido inflada por las cifras revisadas en el estado de Ohio tras un recuento anterior.