MADRID, 10 May. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Malasia ha decidido extender hasta el 9 de junio sus medidas de restricción de movimiento y ciertas actividades comerciales en un decisión que choca con las últimas iniciativas de reapertura, en medio de la cada vez mayor presión política sobre el primer ministro, Muhyidin Yasin.
Las escuelas y los lugares de culto permanecerán cerrados hasta esa fecha mientras los negocios continúan su reactivación para salvar una economía que está perdiendo unos 250.000 millones de dólares al día, según el mandatario.
Si bien el primer ministro ha recordado que la mayor parte del país es "zona verde", menos expuesta al contagio, ha avisado de que el virus es "un enemigo invisible y silencioso, que puede atacar en cualquier parte", ha hecho saber en su comparecencia, recogida por el diario malasio 'The Star'.
El país ha confirmado 6.589 casos de coronavirus y 108 personas han muerto por la enfermedad.
Muhyidin se ha encontrado de frente con esta crisis tras asumir el poder el 1 de marzo después de la dimisión de Mahathir Mohamad, hasta entonces el jefe de estado más anciano del mundo.
Sin embargo, y tras asegurar que cuenta con el respaldo de buena parte del Parlamento, Mahatir ha presentado una moción de censura contra el nuevo primer ministro -- y antiguo ministro de Interior, a la postre -- prevista inicialmente para el 18 de mayo.
Este sábado, Mahatir y el líder opositor Anwar Ibrahim declararon al unísono que no reconocían al actual Gobiern malasio, centrado ahora en equilibrar la contención con el reaperturismo.
Así, a principios de esta semana, permitió a las empresas qie reanudaran las actividades habituales, aunque bajo estrictas pautas de salud, después de tener que cerrar las tiendas durante dos meses mientras las autoridades de salud trabajaban para contener la pandemia.
Las reglas existentes bajo una orden de control de movimiento condicional permanecen vigentes hasta la nueva fecha de vencimiento en junio, que incluye la práctica de higiene estricta y distanciamiento social, ha añadido Yasin.